La participación de ‘master athletes’ y mujeres se consolida y demuestra que el running es una práctica cada vez más extendida para el desarrollo de una vida saludable
Llevar una vida saludable se ha convertido en un desafío al que millones de personas se apuntan cada día integrando, además de una alimentación mediterránea equilibrada, la pasión por deportes como el running. El running aporta numerosos beneficios tanto a nivel físico como psicológico. En general, ayuda a estar en forma y conseguir una actitud más positiva y relajada.
“El running es un deporte que se ha puesto de moda en los últimos años entre personas que ya hemos cumplido hace tiempo los 35 e incluso los 40 años. Iniciarse a edades avanzadas en un deporte tan exigente como éste requiere de una práctica constante, pero también consciente y progresiva. La gran cantidad de personas de entre 35 y más de 65 años que tomaron la salida el pasado 19 de marzo en la III Edición de la 15KM MetLife Madrid Activa demuestra que correr mejora la salud de quienes lo practican, influye positivamente en todos los aspectos de su vida. Para nosotros, patrocinar esta carrera es una apuesta no sólo por la causa benéfica que apoyamos, sino por la mejora de la calidad de vida de todos los que aceptan el reto de cuidarse”, señala Óscar Herencia, director general de MetLife Iberia y runner aficionado.
Según los datos de la carrera patrocinada por MetLife, un abrumador 74% de los corredores que tomaron la salida para recorrer la nada despreciable distancia de 15 kilómetros tenía más de 35 años, mientras que el 26% restante tenía entre 18 y 34.
De los 2.500 corredores que tomaron la salida, el 41% tenía entre 35 y 44 años y el 26% entre 45 y 54 años. Los jóvenes de entre 25 y 34 años fueron el tercer grupo más numeroso (20%). El dato de que el grupo de los jóvenes de 18 a 24 años englobó a únicamente un 6% de los corredores, mientras que el de 55 años en adelante acogió al 7%, da una pista sobre qué franja de edad necesita empezar a implicarse más seriamente en realizar prácticas saludables.
Como demuestran los datos extraídos de la carrera, en la que la mayor parte de los corredores tenía más de 35 años, el número de adultos mayores que corren maratones se ha duplicado en las últimas dos décadas. Según un estudio francés que analizó los resultados de la maratón de Nueva York entre 1980 y 2009 publicado en la revista especializada Age, los corredores de más edad fueron los que lograron reducir más el tiempo de los 42 kilómetros de la carrera.
Por sexos, el 72% de los corredores eran varones y el 28% restante, mujeres, grupo que ha aumentado significativamente en los últimos cinco años.
Las mujeres, según el investigador danés y maratonista Jens Jakob Andersen, que analizó más de 1,8 millones de resultados de 131 carreras de maratón durante cinco años, son corredoras más eficientes energéticamente que los hombres en todos los ámbitos.
«Creo que se debe a que nosotros, los hombres, tendemos a idealizar lo buenos que somos», dijo Andersen a The Washington Post. “Mientras que ellas, conscientes de ‘sus limitaciones físicas’, utilizan la cabeza antes de mover las piernas. Las mujeres son un 18,63% más eficientes en el ritmo de la carrera».
Los expertos del Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica de Francia aseguraron que, en esos 20 años, los tiempos de los corredores se redujeron significativamente en los varones mayores de 64 años y en las mujeres mayores de 44, lo que sugiere que estos corredores, conocidos como ‘master athletes’, todavía no habían alcanzado sus límites físicos.
Además, según un estudio de la Universidad de California sobre la evolución de los resultados olímpicos, las diferencias en los récords deportivos entre hombres y mujeres tienden a disminuir con el tiempo. De hecho, desde la década de los años veinte, las atletas femeninas han progresado dos veces más rápido que los atletas masculinos. A ese ritmo, prosigue el estudio, las diferencias desaparecerían por completo hacia 2050.