
El último informe de ciberpreparación de Hiscox revela un avance en concienciación, pero también incertidumbre ante los nuevos riesgos tecnológicos
La inteligencia artificial generativa será crítica para proteger a las organizaciones frente a amenazas digitales en los próximos cinco años. Así lo cree el 60% de las empresas españolas, que ya consideran esta tecnología una pieza clave en su estrategia de ciberseguridad de cara a 2030. Es una de las principales conclusiones del Informe de Ciberpreparación 2024 de Hiscox, que analiza el grado de madurez digital y el enfoque de las empresas ante los desafíos del ciberentorno.
El informe revela un panorama mixto en la ciberpreparación empresarial. Si bien el 64% de las compañías considera que su estrategia de ciberseguridad se adapta eficazmente a los avances tecnológicos, el 49% aún duda a la hora de adoptar nuevas herramientas por temor a que estas incrementen su exposición a ciberataques. Además, un preocupante 42% reconoce que sus actuales soluciones de protección son insuficientes frente a amenazas que evolucionan con rapidez.
Una carrera contrarreloj ante la transformación tecnológica
El ritmo acelerado de la innovación también está afectando la capacidad de las organizaciones para mantenerse al día. Casi la mitad (48%) cree que el avance tecnológico va más rápido de lo que su estructura permite asumir. De hecho, un 35% reconoce sentirse rezagado en la adopción de tecnologías de ciberseguridad. A esto se suma un obstáculo estructural: un 37% apunta a la falta de talento especializado como una de las principales debilidades en su protección frente a nuevos riesgos.
“Implementar herramientas sin una estrategia de ciberseguridad detrás se convierte automáticamente en una fuente de vulnerabilidad”, ha señalado Ana Silva, directora de Suscripción de Líneas Financieras y Riesgos Empresariales de Hiscox Iberia. “La IA generativa puede ser una gran aliada, pero su uso debe ir acompañado de una política de prevención y gestión de riesgos sólida y anticipada”.
Tecnología emergente: entre el impulso y la incertidumbre
Las tecnologías emergentes suponen tanto una promesa como un riesgo. Mientras el 68% de las empresas considera prioritaria la inversión en tecnología punta, un 60% advierte que estas mismas innovaciones, como la IA generativa o la computación cuántica, pueden suponer nuevos riesgos significativos. De hecho, el 58% de las organizaciones ya se está preparando para los desafíos que podrían plantear los avances en computación cuántica en el futuro cercano.
El estudio concluye que, aunque el sector empresarial español está avanzando en digitalización y ciberconciencia, aún queda camino por recorrer para cerrar la brecha entre innovación tecnológica y seguridad efectiva. La IA generativa se perfila como un elemento clave, pero requerirá una gestión estratégica basada en el conocimiento del riesgo, la formación especializada y el refuerzo de estructuras de ciberprotección.