
Hace algo más de un mes, el movimiento Mutualistas por el Futuro lanzó una campaña de recogida de firmas para preservar la alternatividad en las mutualidades de previsión social, un camino que ha permitido a miles de profesionales de la abogacía cotizar fuera del RETA durante su carrera.
La petición ha superado ya las 1.000 firmas
Alcanzado más de 1.400, lo que supone un gran paso en el camino de la plataforma que nació hace escasos meses con el fin de evidenciar que son muchos los mutualistas que defienden este modelo y quieren seguir formando parte de él.
La alternatividad es el régimen legal reconocido por la Seguridad Social
Permite a determinados profesionales colegiados optar entre cotizar al RETA o hacerlo a través de la mutualidad correspondiente a su colegio profesional. Su método financiero es la “capitalización” y su método de cálculo de la pensión es la “aportación definida” respaldada por los capitales acumulados.
Profesionales de sectores como la abogacía, medicina, arquitectura, economía, ingeniería, procuraduría, entre otros, han optado, legalmente, por canalizar sus
aportaciones a través de mutualidades profesionales propias, construyendo así sus
sistemas de previsión social y ahorros para su jubilación de forma autónoma, flexible y adaptada a sus necesidades.
¿Por qué ahora?
El sistema de alternatividad se encuentra en peligro ya que algunas iniciativas
promovidas por colectivos minoritarios proponen suprimir este derecho, lo que
supondría obligar a miles de profesionales a integrarse de manera unilateral en el
RETA.
La nueva proposición de Ley, aprobada ya para su toma en consideración, introduce una reforma profunda en el sistema de previsión social para los profesionales colegiados. Esta propone que, a partir de 2027, todos los nuevos profesionales que se colegien en un colegio profesional deberán afiliarse obligatoriamente al RETA si realizan actividad por cuenta propia, eliminando así la posibilidad de cotizar únicamente a través de mutualidades alternativas.