
La Fundación RACE ha manifestado su preocupación por el enfoque de la futura Ley de Movilidad Sostenible, a la que acusa de mantener un sesgo que discrimina al automóvil frente a otros medios de transporte. La entidad defiende una movilidad segura, sostenible y accesible, basada en la neutralidad tecnológica y la igualdad de derechos y obligaciones entre todos los usuarios de la vía.
La organización valora positivamente la inclusión de los Planes de Movilidad Sostenible al trabajo, que permitirán a las empresas implantar estrategias de seguridad vial para reducir la siniestralidad en los desplazamientos laborales. Sin embargo, advierte que estos planes deben contar con criterios técnicos claros y apoyo económico a las pymes para garantizar su eficacia.
“Los desplazamientos in itinere y en misión son uno de los principales focos de siniestralidad laboral en España; la seguridad debe primar sobre cualquier otra medida sostenible”, subraya la Fundación.
Otras peticiones de fundación RACE
Entre los aspectos destacados, RACE también considera esencial la renovación del parque automovilístico, cuya edad media supera los 14,5 años. La entidad valora la intención del proyecto de ley de fomentar la modernización del parque, pero critica que el texto no concrete incentivos ni plazos de aplicación.
Por ello, reclama al Gobierno que el futuro reglamento incorpore planes Renove efectivos, incentivos fiscales y una reducción del IVA en sistemas de seguridad y mantenimiento, con el fin de facilitar el acceso a vehículos más seguros y eficientes.
Restricciones en la ZBE
Otro de los puntos de discrepancia se refiere al acceso de los vehículos de auxilio y asistencia a las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). La Fundación lamenta que no se haya aceptado su propuesta para permitir la entrada de estos vehículos cuando estén en servicio, al considerar que esta restricción pone en riesgo la seguridad vial.
“La seguridad no puede depender del etiquetado ambiental del vehículo de asistencia que acude a auxiliar a un conductor o a retirar un obstáculo de la vía”, advierte la entidad.
Finalmente, la Fundación RACE reprocha al texto legislativo un modelo asimétrico, en el que el uso del vehículo privado se penaliza mientras otros modos de transporte reciben incentivos sin asumir las mismas obligaciones.
“El derecho a la movilidad debe ejercerse en condiciones de seguridad, igualdad y sostenibilidad, sin generar exclusión social ni penalizar a quienes dependen del vehículo para su vida laboral o familiar”, añade el comunicado.
RACE defiende una movilidad verdaderamente sostenible y justa, que apueste por la modernización y digitalización del automóvil en lugar de su marginación, reconociendo su papel clave en la cohesión territorial, el acceso al empleo y la actividad económica.