La inteligencia artificial (IA), el ciberseguro y el cambio climático y las catástrofes naturales serán los tres grandes ejes que más impacto tendrán en el sector asegurador en 2026, según las previsiones anuales de GlobalData, plataforma líder en inteligencia de datos y análisis de mercado.
De acuerdo con el informe, las aseguradoras que logren posicionarse como referentes en estos ámbitos obtendrán mejores resultados, desarrollarán productos más avanzados y ofrecerán un servicio al cliente más eficiente. En este contexto, la IA se consolida como la principal tendencia tecnológica del sector.
La irrupción de la denominada agentic AI a lo largo de 2025 ha intensificado el interés por esta tecnología, cuya capacidad para reaccionar a información en tiempo real y tomar decisiones similares a las humanas acelerará su impacto en el negocio asegurador a partir de 2026.
Impulso de las operaciones de M&A en el seguro
Esta evolución ya se refleja en la actividad corporativa del sector. El valor total de las operaciones de fusiones y adquisiciones vinculadas a la inteligencia artificial aplicada a seguros se disparó en 2025, con un crecimiento del 328% en valor y del 125% en volumen.
Este auge, impulsado en gran parte por el desarrollo de la IA generativa y la agentic AI, también se observa en otros indicadores analizados por GlobalData, como el aumento de ofertas de empleo y menciones en informes corporativos, lo que confirma que la IA es una prioridad estratégica para las aseguradoras. Un ejemplo destacado fue la adquisición, en julio de 2025, de una aseguradora tecnológica especializada en seguros comerciales por parte de un gran reasegurador internacional.
La importancia del ciberseguro
Junto a la inteligencia artificial, el ciberseguro se mantiene como otra de las áreas clave de crecimiento. GlobalData prevé que este mercado continúe expandiéndose con fuerza hasta 2030. En concreto, estima que el mercado mundial de ciberseguros alcanzó los 22.200 millones de dólares en 2025 y podría llegar a los 35.400 millones de dólares en 2030, impulsado por el aumento de los riesgos digitales y la creciente concienciación de empresas y organizaciones.
El tercer gran desafío para el sector será el cambio climático y el incremento de los fenómenos meteorológicos extremos. El aumento de la frecuencia e intensidad de catástrofes naturales está teniendo un impacto directo en los seguros de riesgos naturales, con fuertes incrementos tanto en primas como en siniestros, una tendencia que, según GlobalData, continuará en los próximos años. Este escenario está provocando que amplias zonas del planeta se vuelvan progresivamente difíciles o incluso imposibles de asegurar, lo que plantea un problema de gran calado tanto para las aseguradoras como para los consumidores.
En este contexto, GlobalData advierte de que la capacidad del sector para adaptarse a estos tres grandes vectores —IA, riesgos cibernéticos y cambio climático— será determinante para su sostenibilidad y competitividad en el medio y largo plazo.