DAS Seguros se suma a la celebración del Día Mundial de Internet y pone su grano de arena en la concienciación y la prevención del ciberacoso.
La era de la hipertransparencia y lo digital a la que ha dado paso el nacimiento de Internet nos ha empoderado. Ha generado nuevas dinámicas sociales y económicas positivas, eficientes e innovadoras. Los datos son claros. Según el informe “Digital en 2018” publicado por Hootsuite, los usuarios de Internet es España han aumentado en 2 millones durante 2017, lo que supone ya el 85% de la población. Casi el 60% de los españoles utiliza las redes sociales al mes, un 8% más que el año anterior.
Sin embargo, esta revolución también trae consigo nuevos retos y riesgos ante los que debemos aprender a protegernos. DAS Seguros ha asumido como objetivo propio la lucha contra uno de estos riesgos de Internet: el ciberacoso, una de las mayores preocupaciones de los padres en cuanto al uso de Internet por parte de sus hijos. Según los expertos, una educación y socialización segura, hará más libres a las futuras generaciones. Es por eso que en el día de hoy desde DAS nos recuerdan 10 consejos que se pueden practicar, desde la perspectiva legal, para evitar dicha problemática:
Decálogo legal para evitar el ciberacoso
- Mantener los perfiles de las redes sociales en modo privado. Es la forma más eficaz para tener en cuenta a quién se está transmitiendo información o enviando un archivo, aunque es conveniente acompañarla de un control adecuado sobre los círculos de seguidores o amigos online, procurando no aceptar solicitudes de desconocidos.
- Utilizar contraseñas con un alto nivel de seguridad. Éstas suelen ser las que incluyen números o signos de puntuación, así como intercalado de minúsculas y mayúsculas. Asimismo, es conveniente cambiar y renovar las contraseñas de manera regular.
- Informarse acerca de las políticas de uso que publica cada plataforma digital. Así, al mínimo indicio de detección de un comportamiento irrespetuoso con las normas comunitarias, se podrá informar casi inmediatamente a los proveedores del servicio.
- Aprovechar la función de bloqueo. Con ésta es posible prohibir el acceso a aquellos usuarios que envíen mensajes inapropiados o extraños antes de que la situación empeore o derive en un caso de ciberacoso.
- Asegurarse de tener un buen antivirus y cortafuegos. Tener estar herramientas, así como actualizarlas cuando sea conveniente y procurar no utilizar ordenadores que no cuenten con este tipo de programas, es una precaución básica. La falta de estos puede exponer los datos personales que se introducen al ordenador o activar la cámara y otros dispositivos sin previa autorización.
- Utilizar un modelo de cámara con luz piloto. Esta pequeña aplicación nos indicará cuándo el dispositivo está o no grabando, pudiendo evitar de esta manera la intrusión de terceros.
- Tener precaución al compartir información personal en Internet, ya se trate de la dirección, el teléfono, el nombre o los apellidos. El consejo puede extenderse para la información gráfica como la fotografía y vídeos, cuyos recursos pueden ser utilizados en contra de quien aparece en los mismos.
- No responder a provocaciones de un posible acosador, a no ser que sea para informarle de que lo que está haciendo tiene consideración de delito. En todo caso, es recomendable no entrar en el juego, ni replicar los actos a modo de respuesta.
- Compartir las inquietudes con amigos, padres o incluso terceros. Es importante explicar y buscar ayuda si se considera que una situación podría llegar a desencadenar una molestia o un caso de acoso. Atajar una situación a tiempo es evitar un problema.
- Guardar todo lo que se considere una posible prueba de ciberacoso, ya sea un email, una conversación por chat o incluso una publicación online. Podrían resultar de ayuda si se decidiera denunciar los hechos más adelante. A este respecto, el seguro DAS Ciberbullying cuenta con una aplicación móvil -Proofup- que permite a los menores compartir con sus padres cualquier indicio de acoso que detectaran en los terminales móviles; convirtiendo dichas pruebas en evidencias probatorias para posibles acciones legales que se pudieran llevar a cabo si fuera necesario.