El futuro de la ‘Silver Economy’ en España es prometedor, pero necesita mayor desarrollo y enfoque en la calidad
El futuro de la Silver Economy, que atiende a las necesidades del colectivo sénior, es «excelente» como mercado en España, aunque requiere un mayor desarrollo para ofrecer una atención centrada en las personas y mejorar la calidad de los servicios. Esta fue la conclusión de un debate sobre los *Retos de la Silver Economy para el bienestar de los séniors*, organizado por la agencia de noticias Servimedia con el apoyo de onLygal y MDS Silver.
En el evento participaron cinco expertos: Luis Cuervo, director general de onLygal; Juan Carlos Alcaide, director de MDS Silver; Cristina Pallás, directora de la Fundación Mutua de Propietarios; César Antón, ex director general del Imserso; y Ana Fernández, presidenta del Observatorio del Emprendimiento de España.
Falta inversión en la silver economy
Juan Carlos Alcaide destacó que, aunque se habla mucho de la silver economy, en la práctica falta inversión. Criticó que algunas empresas aún la asocian únicamente al mercado geriátrico y defendió la importancia de diferenciar a los seniors de los ancianos: “Me gustaría ver campañas publicitarias que digan: ‘soy senior, no soy un anciano’”. Alcaide también subrayó el desequilibrio entre la oferta y la demanda de cuidados, afirmando que las empresas del sector tienen éxito incluso sin esforzarse mucho, debido a la falta de plazas residenciales y cuidados adecuados.
Por su parte, Luis Cuervo resaltó que, aunque el futuro de la Silver Economy es muy prometedor, el sector geriátrico aún no ha avanzado lo suficiente en términos de calidad y atención centrada en las personas. A medida que aumenta la esperanza de vida, mencionó que muchas personas no han adoptado hábitos financieros para planificar su longevidad, un área que considera crucial. Citó datos que revelan que solo 700.000 españoles tienen un seguro de dependencia, lo que calificó como un hecho «pintoresco y ridículo».
Crear conciencia y productos atractivos
En este sentido, Alcaide abogó por crear conciencia y desarrollar productos atractivos para los seniors, como seguros que complementen las pensiones y cubran necesidades futuras que el Estado no podrá atender. Además, criticó el «egoísmo» de algunos hijos en la gestión del patrimonio de sus padres y defendió productos como la hipoteca inversa o la renta vitalicia como soluciones para la planificación de la longevidad, poniendo a Escocia como ejemplo de un país avanzado en esta área.
Cuervo también hizo hincapié en la importancia de contar con expertos que orienten a los seniors en la toma de decisiones legales y financieras, ya que la normativa cambia constantemente y muchas personas desconocen herramientas clave, como el testamento vital o la autocuratela. Criticó que un 40% de las personas mayores en España no haya hecho testamento notarial, lo que calificó como «una animalada».
César Antón, por su parte, subrayó la necesidad de crear mecanismos financieros que permitan a los seniors complementar su pensión. Coincidió con Alcaide en que el mercado sénior está emergiendo, aunque todavía necesita consolidarse.
Por último, Ana Fernández insistió en la importancia de desarrollar soluciones creativas para planificar la jubilación y el final de la vida, instando a pensar en formas innovadoras para abordar los retos de la Silver Economy.
Foto de Jorge Vlilla Servimedia.
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