El pasado 17 de enero se organizó el primer Foro Inade de 2018 en la Facultad de Derecho de la Universidade da Coruña sobre el riesgo de la internacionalización de la empresa
Cuatro interlocutores de diferentes áreas —departamentos de gestión de riesgos de las empresas, mediación internacional e industria aseguradora— participaron en el foro: en representación del Grupo San José intervino Lourdes Freiría Barreiro, directora general de riesgos y seguros; también estuvo Javier Hernáez Verez, director en Galicia de Aon; Benedetta Cossarini, directora general para España y Portugal de AIG Iberia; y Sanda Blanco González, directora de operaciones por cuenta del estado de CESCE. Como moderador de la sesión intervino Adolfo Campos, director de Fundación INADE.
Bajo la modalidad de mesa redonda, el desarrollo de la sesión se dividió en tres partes: la primera fue la relativa al mapa de riesgos para detectar los que probablemente afectarían en un caso de internacionalización; en la segunda, se trataron los puntos relativos a la transferencia de los riesgos previamente detectados; y, en la tercera, la gestión del contrato y la gestión del siniestro.
En la primera parte de la sesión se abordaron las dificultades a las que se enfrenta un gestor de riesgos a la hora de internacionalizar una empresa. Para Lourdes Freiría “debe identificarse si el país es objetivo de nuestro negocio y para ello debe practicarse un análisis exhaustivo de diversos factores como la seguridad jurídica, legislación, estabilidad financiera del país (riesgo-país)”. Dicho análisis debe basarse en información conseguida por el gestor de riesgos o profesionales como el bróker; las compañías de seguros globales (que pueden tener presencia en ese país o partners), o los peritos, de los que aclara “son una fuente de conocimiento tremenda”.
Lourdes Freiría concluyó enumerando los aspectos que considera fundamentales para afrontar la internacionalización de la empresa: conocer la empresa, dedicarle tiempo y contar con colaboradores dentro y fuera.
A continuación, Javier Hernáez quiso incidir en lo que puede aportar un gran corredor como lo es Aon en el proceso de internacionalización de una empresa y se refirió al estudio de los riesgos catastróficos, del mapa político, en definitiva, a conocer qué temas le preocupan al cliente e intentar solventarlos.
Por su parte, Benedetta Cossarini puso de relieve el papel de la compañía aseguradora en el proceso de identificación de los riesgos afirmando que “AIG aporta experiencia de muchos clientes, de muchos programas internacionales y de haber conocido todo el proceso de principio a fin”. Igualmente, indicó que disponen de una base de datos muy completa, además de otras herramientas para dar soporte a los clientes.
A continuación, Sanda Blanco enfatizó que “la identificación de los riesgos debe llevarlo a cabo profesionales” y que “el empresario debe confiar en sus colaboradores”. También quiso alabar el trabajo desempeñado por el departamento de riesgo-país de CESCE.
Tras la intervención de todos los ponentes, Adolfo Campos preguntó a Javier Hernáez cuál sería la reacción de AON si un bróker local les solicitara ayuda para la internacionalización de la empresa de un cliente. Este señaló que “AON tiene brokers colaboradores, por lo que, en el caso de tratarse de un bróker externo deberá ser sometido a un análisis previo para poder ser colaborador”.
Transferencia de riesgos
A continuación se abrió el segundo bloque de contenido de la sesión referido a la transferencia del riesgo una vez éste ha sido identificado. Lourdes Freiría hizo hincapié en la “necesidad de tener un socio local en el país de destino debido a la diferencia en los estándares que manejamos en España”. Además, “a mayor distancia y mayor presencia del socio en el país en cuestión más complicado deviene el asunto”, añadió. En definitiva, debe buscarse a alguien que pueda ayudar y con el que se establezcan relaciones de confianza.
Adolfo Campos quiso saber su opinión acerca de si es preferible contratar pólizas locales o una póliza máster. A lo que respondió que “no hay una única solución, sino que cada uno deberá escoger la opción que más convenga a sus intereses”. No obstante, Lourdes Freiría mostró su preferencia por una homogeneidad de coberturas, admitiendo, por otra parte, que “ello no es factible para todos los daños ni en todos los países”.
El siguiente turno de palabra fue Benedetta Cossarini, quien señaló que “pensar que podemos cubrir con una póliza única emitida en España todos los países del mundo es una barbaridad. Desde el punto de vista del seguro, desde el punto de vista regulatorio, y fiscal”. Respecto a la opción de ir país por país, apuntó que tampoco le parece “una buena solución desde el punto de vista de control del programa de cobertura y homogeneidad”. Por lo tanto, afirmó que trabajan con pólizas integradas país a país, emitiendo siempre que sea posible pólizas locales.
En opinión de Javier Hernáez, “si lo que desea el cliente es una protección lo más parecida posible a la protección de que disfruta en España, entonces le aconsejaría una local allí con el programa internacional o con su partner”. En casos de riesgos no demasiado importantes, suele recomendar una póliza local a través de la filial de AON en ese país.
Por otro lado, Sanda Blanco explicó los servicios que se ofrecen desde CESCE, incidiendo en que ofrecen cobertura a cualquier incidencia que pueda tener en el país en cuestión, puntualizando que cubren los riesgos extraordinarios que puedan acaecer en cualquier país.
La siguiente problemática propuesta tuvo que ver con las complicaciones que supone, en ocasiones, operar con agentes en el extranjero. Lourdes Freiría puso de manifiesto la gran complejidad que suponen las emisiones internacionales, por la cantidad de tiempo que supone y el esfuerzo burocrático que conlleva.
Otra cuestión planteada es si las compañías de seguros están preparadas para acompañar a sus clientes en el proceso de internacionalización. Desde el punto de vista de la negociación con las compañías de seguros, Javier Hernáez considera que “son minoritarias las compañías preparadas para afrontar este proceso, y que tienen margen de mejora”. Por su parte, Benedetta Cossarini, en relación a los brokers, señaló la necesidad de la obtención de licencia para operar en el extranjero, así como la necesidad de apostar por la formación. Esta última cuestión fue secundada por Lourdes Freiría que aprovechó para solicitar a las empresas aseguradoras la dedicación de recursos humanos formados y suficientes para facilitar la internacionalización.
Gestión del contrato y del siniestro
En la tercera y última fase de la sesión se abordó la gestión del contrato y, en su caso, del siniestro. Concretamente, se analizó la figura del protocolo de siniestros. Lourdes Freiría recalcó que el protocolo “es lo que ayuda a saber que hay que hacer en el caso de la producción de un siniestro”. “Debe ser una herramienta sencilla que indique los interlocutores, contenga un panel con los peritos competentes y cuáles deben ser las actuaciones mínimas de las partes”, añadió.
Benedetta Cossarini, por su parte, manifestó que” estos protocolos son cada vez más comunes y que, en AIG, tienen tanto protocolos internos como con el cliente”. También apuntó que lo más importante de éstos es que sean claros desde la implantación del programa.
Finalizada la mesa redonda, se abrió el turno de preguntas de los asistentes, de las que cabe destacar una de las intervenciones relacionada con los datos arrojados relativos a la escasa o nula operación de los operadores gallegos en el extranjero. Concretamente, tomó la palabra un corredor para matizar que resulta muy complicado para los corredores asesorar a sus clientes en un tema tan complejo como la internacionalización, cuando no cuentan con los medios de las grandes empresas multinacionales.