
La rápida digitalización de las empresas españolas está intensificando su exposición a ciberataques, especialmente con la implementación de tecnologías emergentes. Según el Informe de Ciberpreparación 2024, elaborado por Hiscox, el 60% de las organizaciones afirman que la adopción de inteligencia artificial (IA) generativa ha incrementado su vulnerabilidad frente a riesgos cibernéticos.
Aunque la IA generativa es una preocupación significativa, no es la principal amenaza percibida por las empresas. El informe destaca que un 68% de las organizaciones identifica la realidad virtual como el mayor riesgo en términos de ciberseguridad, seguida por la IA generativa (56%), el análisis predictivo (55%) y la computación cuántica (52%).
Transformación tecnológica y desafíos de ciberseguridad
El estudio revela que el 71% de las empresas españolas ya utilizan IA generativa en sus operaciones diarias, mientras que el 56% ha integrado la computación en la nube, el 48% el análisis predictivo, el 50% la computación cuántica y el 44% la realidad virtual. Estas tecnologías ofrecen oportunidades significativas para la innovación y el crecimiento, pero también presentan retos importantes relacionados con la seguridad digital.
La adopción de estas herramientas requiere no solo talento especializado, sino también la actualización constante de estrategias y protocolos de ciberseguridad. En este contexto, la contratación de ciberseguros se posiciona como una medida clave para proteger los activos empresariales y garantizar la continuidad operativa de las organizaciones.
Construyendo ciberresiliencia
Ana Silva, directora de Suscripción de Líneas Financieras y Riesgos Empresariales de Hiscox España, subrayó la importancia de fortalecer la preparación ante riesgos cibernéticos: “Mientras las empresas españolas avancen hacia una mayor digitalización, los desafíos de ciberseguridad se harán cada vez más evidentes. Es crucial tomar conciencia de esta situación y destinar todos los esfuerzos necesarios para fortalecer la ciberresiliencia”.
La digitalización sigue siendo una prioridad estratégica, pero el informe de Hiscox enfatiza la necesidad de equilibrio entre la innovación tecnológica y una sólida protección contra las amenazas cibernéticas.