El consumo de alcohol, las distracciones y las negligencias, son las causas de la mayoría de los siniestros en carretera durante esta época del año, según CarCrash.es
Las conductas de riesgo al volante se multiplican durante el verano. Esta es la principal conclusión del último informe del Observatorio Europeo de Seguridad Vial, que señala que las conductas de riesgo son un factor clave para explicar el incremento de la siniestralidad en carretera en esta época del año, sobre todo entre la gente joven.
El informe revela que los jóvenes españoles son más propensos a asumir riesgos a la hora de coger el coche, sobre todo cuando viajan con amigos. De hecho, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), nuestros jóvenes tienen casi el doble de probabilidades que la media de sufrir un accidente de tráfico en el periodo estival, debido al incremento de los desplazamientos por carretera hacia zonas de ocio durante las vacaciones.
“El consumo de alcohol, las distracciones por mirar el móvil mientras se conduce y las negligencias, como no llevar el cinturón de seguridad, o no respetar los límites de velocidad son las principales causas que explican la mayoría de los siniestros en nuestras carreteras durante el verano”, recuerdan desde CarCrash.es, plataforma online especializada en accidentes de tráfico.
“La mayoría de los accidentes de tráfico en esta época tienen que ver con conductas de riesgo. Si hay una responsabilidad compartida, todas las víctimas implicadas tienen derecho a una compensación por los daños personales que hayan sufrido”, explica Gonzalo García, CEO de CarCrash.es.
Esta plataforma recuerda los derechos de las víctimas a la hora de reclamar por los accidentes más comunes en esta época del año.
Accidente provocados por el alcohol
Según la DGT, en verano, el número de accidentes por consumo de alcohol se incrementa un 40%. Si la víctima da positivo por alcohol, sólo tendrá derecho a una indemnización si la responsabilidad del accidente es compartida.
No llevar el cinturón de seguridad
Al tratarse de una conducta negligente, se considera que la responsabilidad es de la víctima y puede dar lugar a una reducción de la indemnización a la que tenga derecho.
Accidente con coche sin seguro
El hecho de no contar con un seguro no priva a la víctima de una indemnización, siempre y cuando esta no sea la culpable del accidente. En el caso de que ninguno de los vehículos implicados en el accidente estuviese asegurado, corresponde al Consorcio de Compensación de Seguros indemnizar a las víctimas por los daños sufridos. También en el supuesto en el que haya un coche a la fuga.
Atropello
Este es uno de los accidentes más comunes en carretera por conductas de riesgo. En este caso, el peatón tiene derecho a una indemnización siempre que no sea el único culpable del siniestro.
“Ningún accidente es idéntico a otro. Por eso es muy importante analizar cada situación de manera individualizada, gestionar la reclamación en función de cada caso y valorar la posibilidad de reclamar las indemnizaciones que correspondan” concluye García.