Los conductores mayores presentan una tasa de siniestros viales significativamente menor que los conductores jóvenes, pero son más vulnerables cuando sufren lesiones de tráfico, según un estudio de Fundación MAPFRE.
La investigación revela que los accidentes de tráfico con lesiones a terceros y mayores de 65 años son entre un 24% y un 51% menos frecuentes que los de los conductores más jóvenes. Sin embargo, la fragilidad física hace que los mayores sean más susceptibles a sufrir consecuencias graves en caso de accidente.
Dificultades y decisiones de los conductores mayores
Dejar de conducir es una decisión complicada para muchos mayores. El 45% de los exconductores sénior ha dejado de conducir de manera involuntaria, según los datos recogidos. La mayoría de los conductores mayores abandona la conducción alrededor de los 75 años, con un promedio de un año desde que se plantea la decisión hasta que se hace efectiva. Cerca del 44% de los mayores que han dejado de conducir sienten que su nivel de independencia ha disminuido.
Los expertos de Fundación MAPFRE subrayan que, aunque no se debe restringir injustificadamente la movilidad de los mayores, tampoco se debe permitir que conduzcan si no tienen las aptitudes necesarias. Recomiendan mejorar el conocimiento sobre la relación entre el deterioro cognitivo inicial y la seguridad vial, y alcanzar un consenso sobre las mejores baterías de test para diagnosticarlo.
Impacto emocional y social del cese de la conducción
El estudio de Fundación MAPFRE y el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau destaca las variables socioemocionales que influyen en la decisión de dejar de conducir. El 41% de los exconductores mayores vive esta decisión de forma negativa, sintiendo pérdida de autonomía y control. Además, el 45% abandona alguna de sus actividades habituales tras dejar de conducir.
La investigación también resalta que el deterioro cognitivo es una condición más difícil de diagnosticar en sus fases iniciales en comparación con otras condiciones físicas, como la pérdida de visión. Los expertos recomiendan fomentar una comunicación abierta entre los mayores, sus familias y los especialistas médicos para abordar este tema sensible de manera adecuada.
Recomendaciones para los conductores mayores
Para minimizar los riesgos al volante, los expertos en seguridad vial de Fundación MAPFRE sugieren a los conductores mayores:
- Pasar todos los reconocimientos psicofísicos necesarios para la renovación del permiso de conducir.
- Viajar acompañado siempre que sea posible.
- Evitar el uso del coche en horas punta, condiciones meteorológicas adversas y durante la noche.
- Ser consciente de los efectos de los medicamentos en la conducción.
- Utilizar el transporte público siempre que exista esta posibilidad.
Además, recomiendan aproximarse con cuidado a las intersecciones, mirar dos veces a ambos lados de la carretera antes de proseguir, y extremar las precauciones al girar.
Más vulnerables y con menos siniestros
El informe subraya que, aunque los conductores mayores registran menos siniestros viales con lesionados, son más vulnerables debido a su mayor fragilidad física y al uso de vehículos más antiguos.
Los mayores de 74 años presentan la tasa más alta de fallecidos viales entre todos los grupos de edad, en parte debido a su mayor fragilidad física y la frecuencia de sus desplazamientos por vías secundarias, menos seguras que las autovías y autopistas.
Conclusiones
Jesús Monclús, director de Prevención y Seguridad Vial de Fundación MAPFRE, junto con Isabel Sala, neuropsicóloga de la Unidad de Memoria del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, y Elena Vera, investigadora predoctoral en la misma unidad, enfatizan la necesidad de diseñar nuevos test de aptitudes para la conducción de mayores. Proponen cursos de actualización de conocimientos y habilidades de conducción, y herramientas para el autodiagnóstico preliminar de las capacidades de conducción, incluidas aplicaciones móviles.
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