La incertidumbre económica se perfila como el mayor obstáculo para las empresas españolas de cara a 2025, según la última edición del Estudio de la Gestión del Riesgo de Crédito en España, elaborado por Crédito y Caución e Iberinform. El 46% del tejido empresarial señala el bajo crecimiento económico como su principal preocupación, en un contexto marcado por la inflación y el aumento de los costes operativos.
Entre los desafíos más relevantes que enfrentan las empresas destacan los márgenes comerciales insuficientes (39%) y el incremento de los costes laborales (37%), factores estrechamente ligados a la coyuntura económica actual. A estos se suman la dificultad para captar clientes (33%), el aumento de la competencia (29%), la carga burocrática (28%) y los elevados costes de producción (26%). Otros problemas como el entorno legislativo (16%), el acceso a la financiación (12%) y la morosidad (10%) también generan inquietud.
Impacto de la inflación y los costes operativos en las empresas
Aunque la inflación y los tipos de interés han mostrado signos de moderación en 2024, su impacto sigue siendo notable. El 95% de las empresas confirma haber experimentado algún tipo de repercusión inflacionaria, principalmente en sus estructuras de costes. El 51% ha registrado un aumento en los costes laborales, mientras que un 55% ha visto incrementados sus costes de aprovisionamiento.
Para mitigar estos aumentos, muchas compañías han optado por trasladar parte de estos costes a los precios finales. Sin embargo, esta estrategia es limitada debido a la reducción del poder adquisitivo de los consumidores y a la elasticidad de la demanda. Según el estudio, el 66% de las empresas ha absorbido estos costes, provocando una pérdida de rentabilidad y una disminución en sus márgenes comerciales.
Riesgo de crédito y estrategias de adaptación
La reducción de los márgenes y el encarecimiento de los costes financieros han incrementado el riesgo comercial. El 23% de las empresas percibe un deterioro en la solvencia de sus clientes debido a la inflación, lo que ha llevado al 25% de las compañías a reducir ventas y al 8% a renunciar a ciertos clientes para minimizar riesgos.
A pesar de la progresiva flexibilización de la política monetaria, el 62% de las empresas prevé que los tipos de interés seguirán afectando su capacidad para acceder a financiación en 2025, con un 8% esperando un impacto significativo.
La combinación de estos factores plantea un escenario desafiante para el próximo año, donde la gestión del riesgo y la adaptación estratégica serán clave para mantener la estabilidad financiera y competitiva de las empresas.
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