En los últimos años, España ha experimentado un alarmante aumento en la presencia de plagas. Investigaciones recientes apuntan al cambio climático como una de las principales causas de este fenómeno preocupante. El progresivo incremento de las temperaturas tiene un impacto directo en los ciclos de reproducción de los insectos, acortándolos y fomentando una mayor proliferación. Además, este fenómeno también favorece el asentamiento de especies invasoras, las cuales encuentran en un clima cada vez más cálido el hábitat idóneo para establecerse.
Según el observatorio de siniestros de Asitur, se ha registrado un aumento superior al 80% en los servicios de desinsectación y control de plagas en comunidades durante los últimos cuatro años, de 2019 a 2022. Este incremento refuerza la preocupación creciente en torno a la expansión de plagas en todo el país.
Otros factores que afectan al control de plagas
Si bien las condiciones climáticas desempeñan un papel fundamental, existen otros factores que contribuyen a la proliferación de plagas. Obras en curso en edificios o sus alrededores, falta de limpieza o acumulación de basura, roturas de tuberías y la presencia de agua estancada son algunos ejemplos. Estos factores proporcionan a las plagas el ambiente adecuado para reproducirse y multiplicarse.
En cuanto a los tipos de plagas más comunes, las cucarachas representan aproximadamente el 55% del total, mientras que los roedores (ratas y ratones) alcanzan el 40%. El 5% restante corresponde a otras plagas, destacando la presencia de avispas y la necesidad de retirar sus nidos en espacios comunes.
Lo que dice Astur Focus
El análisis de Asitur Focus también revela que los meses más calurosos concentran la mayor demanda de servicios de control de plagas. Junio encabeza la lista como el mes con más intervenciones, seguido de julio y mayo. Septiembre y agosto ocupan el cuarto y quinto lugar, respectivamente. Estos datos confirman la relación directa entre el aumento de las temperaturas y la aparición de plagas en las viviendas y comunidades.
A nivel provincial, se observa que las regiones más cálidas y húmedas requieren un mayor número de intervenciones de control de plagas. Según datos del año pasado, más de la mitad de todos los servicios se concentraron en solo cinco provincias. Barcelona destaca por encima de todas, representando el 20% de los servicios a nivel nacional. Le siguen Valencia, Alicante, Murcia y Málaga como las provincias más afectadas por las plagas.
Sube la demanda de los servicios del control de plagas
El aumento de las temperaturas debido al cambio climático ha generado un aumento significativo en la demanda de servicios de control de plagas en España. Las cucarachas y los roedores son las plagas más comunes, y los meses más calurosos concentran la mayor cantidad de intervenciones. Las provincias más cálidas y húmedas presentan una mayor necesidad de control de plagas. Ante este escenario, es esencial contar con servicios especializados para hacer frente a este desafío creciente y proteger nuestras viviendas y comunidades de las consecuencias perjudiciales de las plagas.
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