Su objetivo es analizar y conocer las necesidades reales de los jóvenes en materia financiera con el fin de elaborar un correcto plan educativo adaptado a cada edad
El próximo mes de enero la Fundación Junior Achievement lanzará un estudio, realizado con la colaboración de MetLife; que tiene como objetivo plasmar las necesidades reales que les surgen a los jóvenes en materia financiera para así poder realizar un completo plan educativo adaptado a cada edad.
Es un hecho, las finanzas forman parte de la vida diaria de los jóvenes españoles, que ya son consumidores de productos y servicios financieros, disponen de una tarjeta de débito o crédito, realizan transacciones o se disponen a ahorrar. No obstante, la mayoría suspenden en esta materia.
Según los resultados del último informe PISA sobre competencias financieras, uno de cada seis alumnos españoles de 15 años no alcanza el nivel básico en esta materia, situando a nuestro país por debajo de la media de los 13 países de la OCDE. El problema va más allá: hablamos del día a día, de saber tomar decisiones en situaciones cotidianas o ser capaces de resolver asuntos de economía doméstica.
Introducir por lo tanto la educación financiera en las aulas es hoy más necesario que nunca. Sin embargo, es necesario identificar primero qué tipo de acciones económicas utilizan con el fin de definir los contenidos que necesitan aprender a cada edad. Éste es, precisamente, el fin que persigue el estudio de competencias financieras puesto en marcha por la Fundación Junior Achievement, con el apoyo de MetLife, explican ambas instituciones en un comunicado.
Un informe en el que han participado estudiantes de 6 a 18 años, de 1º de Primaria a 1º de Bachillerato, que han respondido a dos modelos de encuesta dirigidas a recopilar información sobre el conocimiento, manejo y gestión del dinero que tienen los jóvenes hoy en día.
Entre las consultas planteadas, los alumnos participantes han tenido que responder a cuestiones sobre el papel y la gestión del dinero, la previsión de riesgos y el consumo responsable, además de medir su conocimiento sobre conceptos y términos relacionados con el dinero: “¿Recibes habitualmente dinero para tus gastos?, ¿dispones de tarjeta de crédito o débito?, ¿qué uso haces de ella?, ¿normalmente ahorras una parte del dinero que consigues?, ¿sueles llevar un control de tus gastos?, ¿tienes tu propio teléfono móvil?”. Estas cuestiones pretenden identificar las necesidades reales en materia financiera de los jóvenes con el fin de elaborar un currículum de contenidos financieros que dote a nuestros estudiantes de todos los conocimientos que necesitan al finalizar la educación obligatoria.