Mejor y más información para concienciar a los ciudadanos de la necesidad de ahorrar para la jubilación. Es una de las medidas que Pilar González de Frutos, presidenta de Unespa, propuso ayer para hacer más sostenible el sistema de pensiones públicas a largo plazo durante su intervención en la jornada “Hacia un nuevo sistema de pensiones. El futuro del ahorro y las pensiones hoy” organizada por Aviva.
González de Frutos, reclamó más transparencia para las pensiones: “es necesario un gran debate para analizar cómo somos capaces de hacer más sostenible nuestro sistema de pensiones” y añadió que “los ciudadanos tienen que estar informados de lo que pueden esperar de su pensión y del conjunto del sistema”. Además, la presidenta de la patronal afirmó que “pensiones públicas seguirá habiendo siempre, están garantizadas por el Estado, pero lo que no está tan claro es cuál será su cuantía. Los países desarrollados han adoptado medidas para compartir esa responsabilidad y que no recaiga sólo en el sector público”.
En el encuentro se analizó en detalle la situación económica actual, el sistema de previsión público español y los retos a los que se enfrenta, qué implicaciones y responsabilidades conlleva este nuevo contexto para el ciudadano y cuál es el papel del sector privado en las circunstancias actuales.
La conferencia contó, además de con la presidenta de Unespa, con las ponencias de Ignacio Izquierdo, consejero delegado de Aviva, y de tres de los miembros del Foro de Expertos del Instituto Aviva de Ahorro y Pensiones: Guillermo de la Dehesa (Chairman), J. Ignacio Conde- Ruiz y José Antonio Herce.
Entorno económico y retos de futuro
Por su parte, Guillermo de la Dehesa analizó el entorno económico español y señaló que, de acuerdo con estimaciones del FMI, la economía española crecerá un 0,8% en 2014, un 1,6% en 2015 y un 1,7% en 2016 y 2017 y un 2% en 2018, todavía lejos del 3% de los años del auge. Sin embargo, advirtió de que “se han acumulado desequilibrios muy importantes en el stock de empleo, de deuda pública y externa que llevará bastantes años reducir a niveles normales”. En concreto, la deuda pública se sitúa en el 90% del PIB, la externa en el 175% y la posición inversora internacional neta en el 95% del PIB. El stock de empleo ha caído de 20 millones de afiliados en 2007 a 16,5 millones actuales. Estos factores, unidos al envejecimiento de la población, incrementarán notablemente los gastos en pensiones y sanidad en las dos próximas décadas.
J.Ignacio Conde-Ruiz detalló las actuales dificultades a las que se enfrenta el sistema público de pensiones, sus retos y la evolución futura del mismo. Son varios los factores que en este punto destacó el experto tales como la necesidad de seguir profundizando en reformas para adaptar el sistema a la nueva realidad económica de manera que “si cada vez se viven más años la solución pasa por trabajar más o percibir pensiones más bajas”. Asimismo, apuntó que la reforma de 2011 ha sido un paso en la buena dirección pero aún quedan puntos por desarrolla como el factor de sostenibilidad. “La introducción del factor de sostenibilidad será clave en los próximos años, permitirá, ante nuevos cambios demográficos y socioeconómicos, el ajuste automático de las pensiones, al igual que ocurre ya en la mayoría de los países de nuestro entorno”.
Por su parte, José Antonio Herce analizó en profundidad las implicaciones para la ciudadanía y la necesidad de que ésta tome más protagonismo en la planificación de su financiación de cara a la jubilación. Sin embargo, hizo un llamamiento a los poderes públicos y responsables del sector privado para “que avancen en lo relativo al suministro de información integrada y regular a los afiliados y partícipes de los distintos sistemas de pensiones con objeto de que éstos planifiquen más eficientemente de cara a su jubilación y puedan formar su propia opinión sobre este hito fundamental del ciclo de vida individual y del sistema de bienestar”.
En relación al papel del sector privado, Ignacio Izquierdo, destacó la triple responsabilidad de las empresas. Así, comentó que resulta esencial fomentar la educación financiera entre los ciudadanos, poner a disposición del Gobierno y los agentes sociales los conocimientos de las empresas y contribuir en el diseño de productos de previsión complementarios que cumplan altos estándares de calidad. “El Instituto Aviva de Ahorro y Pensiones, como plataforma de debate y difusión de conocimiento sobre el ahorro a largo plazo, es una muestra del firme compromiso y colaboración de la esfera privada con la sociedad y la Administración en pro de un sistema sostenible”.