La aseguradora AIG ha renovado su compromiso con el medioambiente durante el pasado ejercicio. La compañía recuerda en un comunicado que ha sido “la primera aseguradora norteamericana comprometida con el medioambiente y el cambio climático, reconociendo el consenso científico que plantea este cambio como una realidad”.
Consciente de las implicaciones del cambio climático en la industria aseguradora, AIG ha analizado los más recientes estudios y políticas climáticas para anticipar cambios potenciales en los perfiles de riesgo, modelos de suscripción y planes estratégicos especialmente orientados.
Así mismo, señala que ha considerado los cambios en el clima y las tendencias meteorológicas como una parte integral del proceso de suscripción de pólizas, para tener en cuenta las nuevas dimensiones de riesgo que el cambio climático puede implicar.
También se ha diseñado y renovado la gama de productos y servicios específicamente orientados a los riesgos medioambientales, para ayudar a sus clientes a ser proactivos en esta materia, incluyendo la difusión de conceptos como la resiliencia y las políticas de prevención ante los desastres naturales, promoviendo la adaptación de las empresas, el reforzamiento de medidas de seguridad y promoviendo la reducción en las emisiones de gases.
Oficinas más eficientes
La aseguradora ha invertido más de 260 millones de dólares en mejorar sus oficinas en todo el mundo, lo que engloba la utilización de fuentes de iluminación y energía más eficientes para sus infraestructuras. Por ejemplo, en los últimos dos años, se ha reducido el consumo de energía de las oficinas de Nueva York en un 15%, lo que representa una reducción de 2.200 toneladas anuales de emisiones de CO2.
También en las oficinas de AIG en España se han sustituido todas las luminarias, por otras más eficientes, con ahorros en electricidad de hasta el 65%, con el consiguiente ahorro en términos medioambientales; además de iniciativas de reciclado de materiales, papel de oficina, envases de tóner para las impresoras y otras medidas similares, que pueden parecer pequeñas, pero que consideradas en su conjunto aportan mucho en términos tanto ecológicos como de ahorro de gastos superfluos.
Así mismo, se ha adquirido un compromiso en Reino Unido para la reducción del consumo de carbón de un 20% para 2020. Lo que ha permitido ya en los últimos dos años, que se hayan reducido las emisiones en un 10%, lo que ha supuesto un total de 470 toneladas anuales de emisiones de CO2.
Con la empresa informática Dell, AIG firmó un convenio en EEUU para recoger y entregar todo el equipamiento tecnológico obsoleto, lo que ha supuesto más de 196 toneladas de aparataje electrónico reciclado que se ha evitado enviar a vertederos.
En el último ejercicio, las oficinas de AIG en otros 16 países, España entre ellos, han participado en programas de gestión documental digitalizada, lo que ha hecho que se duplique el número de documentos archivados y gestionados electrónicamente y que el 95% de los procesos de suscripción se hayan gestionado sin papel. La aseguradora trata en este momento con más de 22.000 usuarios de forma electrónica.
En opinión de Francisco Benimeli, director territorial para Levante de AIG, “desde AIG tratamos de que la conciencia ecológica sea cada día más profunda y que de esa forma de pensamiento se deriven acciones concretas de ahorro en recursos y sostenibilidad, por ejemplo, con nuestro sistema de cotización automatizada “Rapid Cover”, que permite a los brokers y corredores cotizar los ramos en que opera AIG, por medios 100% electrónicos, sin ninguna intervención de papel. Este es uno de los desarrollos que últimamente hemos implantado en España y otros países, con una muy positiva aceptación por parte de los mediadores; a fin de cuentas tenemos una fuerte obligación para con las generaciones futuras de legarles un planeta lo más equilibrado posible. Desde AIG tratamos de aportar las soluciones a nuestro alcance, como es la divulgación de herramientas on-,line como Rapid Cover”.