El club de automovilistas ofrece consejos específicos para viajar a la temperatura adecuada y recomienda realizar una revisión de mantenimiento antes del viaje.
Las altas temperaturas de las últimas semanas son un inconveniente añadido a la hora de ponerse al volante. Viajar a la temperatura adecuada en el habitáculo —entre los 21 y los 23 grados— reduce el riesgo para el conductor, ocupantes del coche y demás vehículos de la vía. El Race insiste en ello.
Consejos del Race relacionados con la conducción en épocas de mucho calor
- Preparar el vehículo. El calor no estropea los coches, pero sí hace más evidentes los problemas de mantenimiento. Es básico revisar el vehículo antes de emprender la marcha, tanto las piezas como los niveles de líquidos.
- Conducir durante las horas menos calurosas.
- Parar cada dos horas o cada 200 kilómetros y siempre ante la mínima señal de fatiga al volante.
- Evitar deslumbramientos usando gafas de sol polarizadas.
Antes de salir
Aparte de comprobar el correcto estado del vehículo, los niveles de líquidos, neumáticos…, conviene asegurarse de llevar los elementos obligatorios —triángulo de emergencia y chaleco reflectante— y herramientas: gato, fusibles de repuesto, bombillas… Recordar que los animales no deben viajar sueltos por el habitáculo
En camino
Parar cada dos horas, no beber alcohol, cumplir las normas de circulación, respetar los límites de velocidad. Deben usar los sistemas de retención del vehículo todos los ocupantes. Tampoco olvidar que al final de los trayectos aumenta el riesgo: fatiga acumulada del viaje, ganas de llegar al destino, posibles retenciones en las entradas, noche.
Por supuesto, no hay que descuidar nunca la seguridad, ni siquiera en los recorridos cortos. Muchos accidentes se producen en el destino, en pequeños recorridos donde nos confiamos.
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