La dotación aportada alcanza los 800.000 euros
AXA Research Fund, el fondo para la investigación del Grupo AXA, ha otorgado al Centro de Investigación Cooperativa en Biomateriales, Biomagune, en San Sebastián, una cátedra permanente al equipo liderado por el científico Maurizio Prato. La dotación alcanza los 800.000 euros y servirá para conocer las aplicaciones prácticas de nuevos materiales, como los nanotubos de carbono y el grafeno, en el ámbito de la neurociencia y las lesiones medulares.
Jean-Paul Rignault, CEO de AXA España y portavoz del AXA Research Fund en España, ha asegurado sentirse “muy orgulloso de contar con proyectos destacados e innovadores llevados a cabo en España” y ha añadido que “apoyar a la comunidad científica es fundamental, no sólo para ayudar a difundir su conocimiento, sino para contribuir a la comprensión de riesgos que afectan a nuestra sociedad y, con ello, a su prevención”.
El principal objetivo de este proyecto es “proporcionar una nueva comprensión de este tipo de lesiones, que suponen un gran reto social, ya que pueden acabar en una parálisis parcial o total del individuo, teniendo consecuencias devastadoras en la calidad de vida y de necesidades de atención de las personas que la sufren”.
Los resultados de esta investigación ayudarán en los avances de los tratamientos con nanomateriales de carbono, los cuales ayudan en la regeneración neuronal gracias a su capacidad de volver a conectar piezas enteras de la médula espinal. Los nanotubos de carbono son unas estructuras cilíndricas, 15.000 veces más pequeñas que un cabello humano, dotadas de una extraordinaria eficiencia para transportar electricidad, ayudando a las neuronas a intercambiar señales eléctricas sin provocar rechazo en los tejidos”.
A su vez, dentro del macroproyecto europeo llamado Graphene Flagship, los investigadores desarrollarán una serie de sensores y electrodos para la estimulación cerebral basados en grafeno. Este material estará depositado sobre sustratos como el silicio u otros semiconductores similares, para desarrollar las mencionadas aplicaciones biológicas.
Esta dotación de 800.000 euros se suma a la cantidad que AXA Research Fund ha otorgado recientemente a otros proyectos españoles, incluyendo dos cátedras permanentes, como la que estudia la ciencia de la teoría cuántica a cargo del profesor Antonio Acín en el Instituto de Ciencias Fotónicas de Barcelona o la que analiza la predicción de tormentas de arena y polvo, de la mano del ingeniero ambiental Carlos Pérez García-Pando en el Centro Nacional de Supercomputación de Barcelona.