La aseguradora AIG ha realizado un informe con el que ofrece consejos para ayudar a reducir la incertidumbre que genera el riesgo cibernético. Un tema a tener en consideración, como prueba el hecho de que en 2014, el Centro de Lucha contra el Ciber Crimen en Internet del FBI (Internet Crime Complaint Center) recibió más de 250.000 reclamaciones relacionadas con delitos informáticos. En total, el coste que supusieron dichas quejas para las personas implicadas ascendió a 800 millones de dólares.
AIG considera que se pueden realizar varias acciones con el fin de incrementar la seguridad cibernética: programar con una estructura fuerte y sólida, y con contraseñas únicas para todos los dispositivos y cuentas; tener una contraseña de seguridad para el WI-FI; leer los correos electrónicos y la información online con precaución; instalar un sistema de seguridad anti-virus y anti-malware de una compañía conocida; cerciorarse de actualizar periódicamente los sistemas de software y sistemas operativos; limitar la cantidad de información personal que se comparte online; y utilizar un eliminador de archivos antes de vender o reciclar los viejos dispositivos.
Por otro lado, la firma también ofrece varios consejos con el fin de proteger a los hijos de los ataques cibernéticos: ubicar un ordenador para el uso de los niños en un área abierta de la casa; filtrar y supervisar las actividades online que llevan a cabo los hijos mediante controles que pueden ayudar a estar presentes en ellas; crear reglas de seguridad y colocarlas en un lugar visible; cultivar un interés sobre las actividades en internet de los hijos; ser un modelo de seguridad online cuando se está haciendo uso de la tecnología; y ocultar la cámara del ordenador o televisor salvo cuando realmente se necesite para videollamadas
Para Lucas Scortecci, director de líneas financieras de AIG Iberia, “la seguridad cibernética en el hogar no sólo trata de implantar tecnología de protección, sino que los usuarios, incluidos los niños, sean conscientes y estén educados sobre los riesgos a los que pueden exponerse cuando navegan por Internet”.