La dirección general asume la gestión del riesgo de crédito durante la pandemia

Gestión del riesgo de crédito. Noticias de seguros

Frente a la crisis de 2008, la creación de departamentos de riesgos registra valores mínimos: la gestión técnica de la política de riesgo de crédito comercial sigue recayendo en los departamentos financieros

La dirección general ha incrementado once puntos su influencia en la definición de la política de riesgo de crédito comercial durante la pandemia. De acuerdo con el Estudio de la Gestión del Riesgo de Crédito en España, que impulsan Crédito y Caución e Iberinform, el primer ejecutivo del 70% de las empresas está directamente involucrado en la gestión del riesgo de crédito, el porcentaje más elevado de la serie histórica.

Este incremento es un indicador de, hasta qué punto, las empresas están percibiendo un cambio en los riesgos asociados a sus ventas de bienes y servicios y están adoptando medidas extraordinarias de control.

Quién gestiona el riesgo de crédito

Las direcciones comerciales, que gestionan directamente la cartera de clientes y la búsqueda de ventas en el mercado potencial, incrementaron su colaboración con las áreas técnicas que definen las líneas de crédito comercial en los primeros meses de la pandemia, cuando se incrementó la percepción del riesgo de crédito. Sin embargo, de acuerdo con los datos del Estudio elaborado a partir de la consulta a cerca de 700 gestores de empresa, han sido excluidas paulatinamente del circuito a medida que el primer ejecutivo ha asumido la toma de decisiones.

Frente a este crecimiento del papel del primer ejecutivo como último decisor y los departamentos comerciales, para aportar una visión de impacto en la primera línea de la cuenta, la existencia de unidades de riesgos sigue registrando valores mínimos: solo el 23% de las empresas cuenta con áreas especializadas en la gestión del riesgo de crédito comercial. Se trata de un indicador de hasta qué punto el peso de la gestión técnica de la política de riesgos del crédito comercial sigue recayendo, como una tarea más, en los departamentos financieros (66% de las empresas) y estamos todavía lejos de los niveles de creación de departamentos especializados que se produjo en la anterior crisis económica.

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