El IEB alerta de una desaceleración en la economía mundial mundial en 2024, marcada por la inflación, la guerra y el conflicto en Gaza.
El IEB presenta el informe Perspectivas de la Economía Mundial 2024’, elaborado por Aurelio García del Barrio. El estudio destaca la visión global y de las principales economías del mundo además de hacer hincapié en los riesgos y desafíos de la economía española el próximo año.
El crecimiento ha perdido impulso, la alta inflación está demostrando ser persistente, la confianza se ha debilitado y la incertidumbre es alta. La guerra de Rusia contra Ucrania ha hecho subir sustancialmente los precios, especialmente de la energía y las commoditie. Esto se suma a las presiones inflacionistas en un momento en que el coste de la vida ya estaba aumentando rápidamente en todo el mundo.
Las condiciones financieras mundiales se han endurecido significativamente
En medio de las medidas inusualmente enérgicas y generalizadas para aumentar las tasas de interés oficiales por parte de los bancos centrales en los últimos meses, lo que ha pesado sobre el gasto sensible a los intereses y se ha sumado a las presiones que enfrentan muchas economías de mercados emergentes.
En general, el mercado laboral se ha mostrado resiliente en muchas economías avanzadas, pero los aumentos salariales no han seguido el ritmo de la inflación de precios, lo que ha debilitado los ingresos reales a pesar de las medidas adoptadas por los gobiernos para amortiguar el impacto del aumento de los precios de los alimentos y la energía en los hogares y las empresas. Ahora se ha sumado el conflicto entre Israel y Hamás, en la franja de Gaza, que muestra la inestabilidad de esa región. En unos 20 meses, dos crisis gravísimas, de rasgos inusitados, han sacudido el mundo.
García del Barrio advierte: «Las estimaciones de crecimiento global apuntan hacia un entorno de desaceleración económica en el que los mecanismos de transmisión de la política monetaria a la economía real están comenzando a mostrar sus efectos con más fuerza, con una contracción del crédito, un debilitamiento de los mercados laborales y claros síntomas de moderación en la inflación».
España
La economía española se enfrenta a una amalgama de ideologías en el nuevo gobierno, lo que dificulta el mantenimiento del equilibrio de fuerzas entre todas ellas. La previsión de crecimiento de la economía española es del 2,3% para 2023 y del 1,5% para 2024. Las políticas públicas adoptadas en respuesta a la crisis energética y al repunte de la inflación, que serán retiradas al término de 2023, contribuirían negativamente al avance del PIB en 2024. En sentido contrario, otros factores, como la paulatina disminución de las presiones inflacionistas, la recuperación gradual de la confianza de los agentes, la resiliencia del mercado laboral y la intensificación prevista en el despliegue de los proyectos acogidos al Mecanismo de Recuperación y Resiliencia aportarían un vigor creciente a la economía española en 2024.
También te puede interesar:
- IEB presenta nueva formación en seguros y gestión de riesgos con expertos de la industria
- La quiebra del SVB hace tambalear la estabilidad financiera