La digitalización está generando tanto nuevas oportunidades de crecimiento como desafíos inéditos en el sector asegurador. La creación de valor digital ha llevado al aumento de los activos intangibles de las empresas, incluyendo datos digitales. Al mismo tiempo, la creciente dependencia de la infraestructura digital hace que estos activos sean más vulnerables, especialmente ante interrupciones comerciales y riesgos de ciberataques.
Según el último estudio Sigma, «La economía de la digitalización en el seguro», del Instituto Swiss Re, los beneficios potenciales en todo el mundo y a lo largo de la cadena de valor del seguro están lejos de agotarse. El informe presenta el Índice de Digitalización del Seguro, que rastrea el progreso realizado en 29 países en lo que respecta a la digitalización de sus mercados de seguros.
Los mercados más digitalizados del seguro
Corea del Sur lidera el índice, seguido de Suecia, Finlandia y Estados Unidos. Aunque los mercados avanzados con una infraestructura física sólida y altas tasas de acceso a Internet han avanzado más en la digitalización de sus economías, China, Eslovenia e India están alcanzando rápidamente. China, por ejemplo, ha avanzado diez lugares en solo diez años. Esto se debe a que los mercados emergentes pueden adoptar directamente nuevas tecnologías digitales en lugar de realizar una transición desde sistemas heredados.
Jerome Haegeli, economista jefe del Grupo Swiss Re, afirma que «el estudio muestra claramente una correlación positiva entre la resiliencia y la digitalización. Para la sociedad, la digitalización es una fuerza que brinda a más personas acceso a seguros y, de esta manera, cierra las brechas de protección. Para las aseguradoras, los beneficios de una mejor suscripción, mitigación de riesgos y medición de riesgos a través de la digitalización del seguro mejoran la calidad y eficiencia de su trabajo».
Nuevos riesgos derivados de la digitalización
La digitalización de la economía en general también creará nuevos grupos de riesgo, abriendo oportunidades para las aseguradoras. La tecnología digital ha facilitado modelos de negocio basados en la economía compartida, lo que ha resultado en cambios fundamentales en los riesgos operativos y las responsabilidades que requieren soluciones innovadoras de transferencia de riesgos. Servicios de la economía compartida, como Uber y Airbnb, están reemplazando cada vez más la propiedad privada.
Esto requiere un cambio en la mezcla de negocios, pasando de líneas personales a comerciales basadas en el uso, ya que las líneas personales generalmente excluyen la cobertura para el uso comercial de vehículos y viviendas. Las aseguradoras pueden contribuir a ofrecer dicha cobertura a través de soluciones innovadoras de transferencia de riesgos digitales.
El riesgo de no asegurar los intangibles
Con el cambio de la producción de bienes físicos a la provisión de información y servicios, el valor global de los activos intangibles, que cada vez incluyen activos digitales, de las empresas cotizadas ha aumentado cinco veces en los últimos 20 años, llegando a los 76 billones de dólares en 2021. Casi el 80% de ese valor sigue sin asegurarse. Las empresas necesitarán protección contra riesgos digitales, como interrupciones comerciales y riesgos cibernéticos, así como los emergentes riesgos de responsabilidad relacionados con la inteligencia artificial.
La seguridad cibernética es una preocupación clave para las empresas a nivel mundial, como lo refleja el rápido crecimiento de la demanda de seguros cibernéticos. El Instituto Swiss Re estima que las primas globales por ciberseguros alcanzarán los 16 mil millones de dólares en 2023, un aumento del 60% con respecto a 2021, y 25 mil millones de dólares para 2026.
El uso de los datos
La tecnología digital permite a las aseguradoras recopilar y procesar grandes conjuntos de datos utilizando dispositivos conectados, análisis de datos y aprendizaje automático. Esto permitirá evaluaciones de riesgo más integrales y precisas, y una mejor fijación de precios de riesgos. Las soluciones digitales también pueden automatizar tareas estandarizadas, como la recopilación y el análisis de datos para la suscripción, reduciendo los costos y, en última instancia, llevando a primas más bajas. Los proyectos de transformación digital de las aseguradoras apuntan a una mejora de 3 a 8 puntos porcentuales en las tasas de pérdida y ahorros del 10 al 20% en otras partes de la cadena de valor.
Pravina Ladva, directora de Tecnología Digital y Grupo en Swiss Re, dijo: «A pesar de la rápida transformación digital de la industria de seguros, acelerada por los avances recientes en tecnología de vanguardia, todavía vemos un potencial significativo para hacer que los seguros sean más accesibles y asequibles para los consumidores. Nuestra industria debería ver esto como un estímulo para seguir invirtiendo en soluciones innovadoras y adaptarse a los riesgos emergentes».
Para los consumidores, los mercados en línea conducen a una mayor transparencia de precios, presentan múltiples productos y proveedores de seguros en un solo lugar y permiten a los clientes completar el proceso de incorporación en línea de manera fluida, haciendo que los seguros sean más accesibles y asequibles. Además de la distribución, las inversiones en tecnología de seguros se han desplazado hacia mejoras de eficiencia y mejora de la suscripción y los reclamos.
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