La revolución digital ha llegado a la salud y está sustentada en la tecnología. Pero sobre todo, significa un cambio de usos y de comportamientos. En un mundo conectado la gestión de los datos va a permitir mejorar la experiencia del cliente, algo que marcará la transformación en el mundo de la salud.

Esta ha sido una de las conclusiones expuestas por Pedro Díaz Yuste, director de Salud Digital de Mapfre, en la tercera edición del foro Ageingnomics, organizado por Mapfre y Deusto Business School.

Gran camino por delante en cuanto a digitalización

En este foro ha quedado patente que el mundo de la salud acapara cada vez más interés y prueba de ello es que en España hay más de 200 startups relacionadas con esta materia y que el envejecimiento es un reto global. 2017 es el primer año en la historia en la que hay más personas mayores de 65 años que niños menores de 5 años en el mundo.

El sector sanitario, tanto en el ámbito público como privado, tiene un largo camino todavía por delante en cuanto a digitalización y es precisamente la tecnología la que puede ayudar a desarrollar servicios de detección y prevención, gracias a un buen análisis de los datos, para así mejorar la salud de las personas. Es precisamente el análisis de los datos el que puede ayudar a las empresas y también al sistema sanitario a desarrollar modelos predictivos de investigación y propiciar un sistema sanitario que aprenda.

Oportunidades del envejecimiento

En el encuentro, han participado, además de Pedro Díaz Yuste, representantes de diferentes ámbitos relacionados con la salud: Juan Abarca Cidón, presidente de HM Hospitales, Sergio Torrijos Selma, head of industry Finance de Google España, Guillem Serra, CEO y cofundador de Mediquo, y Roberto Nuño Solinís, director de Deusto Business School Health.