Es algo inevitable pero a nadie le gusta hablar de la muerte. Ni de la propia ni de la de un ser querido. Pero lo cierto es que ante esos duros trances, la mejor opción es estar bien protegido, ya sea con un seguro de vida o de decesos, que permita a nuestra familia hacer frente a todos los gastos y los obstáculos que se presentan cuando un ser querido nos deja.
El sector asegurador cuenta con una amplia oferta de seguros de decesos. Aunque su objetivo es finalista: hacer frente al sepelio y a todos sus gastos derivados, contar con una póliza de decesos permite al asegurado acceder a otros servicios de valor añadido, como servicios de asistencia familiar con los que la compañía se encarga de aliviar la pesada carga administrativa de un trance como este, además de otros servicios que pueden disfrutarse antes de que ocurra el siniestro.
El seguro de decesos es, además, uno de los más contratados en el mercado español. Ya sea por tradición familiar o por precaución en el momento de formar una familia. Lo que seguro que no sabías es que a lo largo de la historia ha habido siempre diferentes formas de protegerse ante los gastos de organizar un funeral, desde las Collegia Funeralitia romanas hasta el pendiente de oro de los piratas del siglo XVII que más allá de una cuestión de adorno servía para pagar los gastos de entierro.
Preventiva Seguros recuerda que el seguro de decesos es uno de los más importantes para una familia y por ello debe asesorarse con especial cuidado por parte de las redes de distribución y los corredores de seguros. Porque, además, el seguro de decesos puede convertirse en un obstáculo financiero en los años en los que más se necesita si su contratación no ha contado con el asesoramiento adecuado.
La compañía explica que hay dos formas básicas de acceder a estos seguros, a través del pago de una prima única o del pago de primas periódicas. En ambos casos, la prima aportada debe ser suficiente para cubrir el coste del sepelio y el riesgo de que este se produzca antes de lo esperado.
Si el asegurado opta por el pago de primas periódicas durante toda la vida, se enfrenta, a su vez, a varias opciones. Las denominadas primas naturales comienzan siendo muy económicas cuando el asegurado es joven y van subiendo su precio a medida que envejece. A largo plazo estas pólizas suponen un peligro, o un “seguro inseguro”, ya que en muchas ocasiones la carga económica es tal alta que el asegurado se e obligado a prescindir del seguro, justo cuando más falta le hace. Es un claro ejemplo de que lo barato sale caro, recuerda la compañía.
La mejor para saber de antemano cuánto va a costar el seguro es optar por las primas niveladas o por pólizas de prima semi natural que va nivelando la prima a mediad que el asegurado cumple años. De esta manera, el coste del seguro se mantiene más o menos estable a lo largo de toda la vida útil de la póliza y esta puede cumplir su cometido, ayudar a la familia en esos duros momentos.
Yo diría que lo mejor sería empezar con una prima semi natural para pasar a modificar la póliza a prima nivelada a partir de los 60 años dado que ello te deja pagando una prima más equilibrada y correspondiente a la edad actuarial de cada asegurado, si desde el inicio fuera prima nivelada este cliente pagaría mucho más y no estaríamos asesorando correctamente. saludos.