Santalucía ha atendido 7.000 siniestros por el fuerte temporal ‘Gloria’, que ha afectado considerablemente al sureste peninsular y las Islas Baleares. La borrasca, que ha afectado sobre todo a la costa, ha generado también efectos devastadores en zonas interiores con vientos superiores a 120 km/h, además de nevadas, lluvias torrenciales y fuertes granizadas en las últimas semanas.

La compañía ha atendido más de 7.000 siniestros declarados a través de su red de mediadores y líneas de atención al cliente, en las provincias de Barcelona, Valencia, Alicante, Madrid, Islas Baleares, Castellón, Málaga, Tarragona, Murcia, Girona, Cáceres y A Coruña. De las 12 provincias, Barcelona ha sido la más afectada, con más de 2.700 incidentes, seguida por Valencia y Alicante, con 1.130 y 621 siniestros, respectivamente.

Riesgos extraordinarios atendidos por Santalucía

Del total de incidencias gestionadas por la compañía a causa de este temporal, 156 casos han sido por riesgos extraordinarios (inundación). En los que los profesionales de la compañía han realizado la labor de asesoramiento e información al Consorcio de Compensación de Seguros para su tramitación directa. El resto de los casos, que superan los 6.800, han sido a consecuencia de la lluvia, el viento o el pedrisco. Lo que se conoce como fenómenos atmosféricos.

Todas las incidencias han sido gestionadas con los medios habituales con los que cuenta SANTALUCÍA para hacer frente a estos sucesos: inspectores y supervisores, su propio contact center ACCEPTA, su red de profesionales colaboradores formada por 200 peritos y los cerca de 2.000 reparadores de IRIS ASSISTANCE, así como los gestores de siniestros de esta misma empresa del GRUPO SANTALUCÍA.

Recomendaciones ante un temporal como ‘Gloria’

Según los expertos de Santalucía, los consejos básicos para prevenir daños ante el aviso de una alerta climatológica como ‘Gloria’ son:

• Proceder al correcto cierre de puertas, ventanas, claraboyas u otras aberturas de la vivienda o local. Si las citadas aberturas cuentan con contraventanas, cerrar también el máximo que se pueda de estas.
• Mantenerse prudencialmente retirados de ventanas y puertas y también alejar bienes como aparatos electrónicos (ordenadores, televisores…) u otros especialmente susceptibles de verse dañados.
• Recoger toldos, capotas, persianas enrollables no fijas o similares que figuren instalados en las partes exteriores de la vivienda o local, asegurándose de que cuentan con el debido anclaje o sujeción.
• Retirar de ventanas, terrazas, patios o cualquier otra zona exterior de la vivienda o local todos aquellos objetos no fijos que puedan verse dañados y que, además, puedan precipitarse y causar daños a personas u otros bienes.
• Mantener limpios los desagües situados en terrazas y balcones.
• Taponar los desagües de fregaderos, lavabos, bañeras y elementos similares.
• Reducir al máximo el número de electrodomésticos en funcionamiento, especialmente en los casos de tormentas con una evidente carga eléctrica.
• Tener a mano un teléfono móvil cargado y operativo con el que, en caso necesario, poder contactar con servicios de urgencia para pedir ayuda y, en cualquier caso, tener grabado en el mismo el teléfono de contacto con su compañía aseguradora.
• Tener disponibles linternas, radio, botiquín básico y agua.

 Y tras los daños causados

• Contactar con su compañía aseguradora, lo más rápidamente posible.
• Conservar los restos de bienes dañados hasta que los peritos de su compañía o, en su caso, del Consorcio de Compensación de Seguros, los hayan visto, tasado, llegado a un acuerdo sobre su importe y les hayan indicado que ya pueden desprenderse de los mismos.
• En caso de imposibilidad de lo anterior, efectuar reportaje visual (vídeo o fotos) de los daños.
• Cuando se trata de bienes muebles afectados (sofás, mesas, ropa, cortinas, alfombras, etc.), situar estos en un lugar seco y aireado. Para evitar que sus daños se agraven.

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