El impacto positivo de la IA generativa en las carreras profesionales emergentes

El impacto positivo de la IA generativa en las carreras profesionales emergentes

Un estudio de Capgemini revela el impacto de la IA generativa en las carreras profesionales y su potencial para transformar estructuras organizativas y directivas.


El nuevo informe del Instituto de Investigación Capgemini sobre la IA generativa  en el trabajo, “Gen AI en el trabajo: El futuro de las organizaciones” señala que la IA generativa podría tener un impacto positivo en las primeras etapas de las carreras profesionales. A largo plazo, tiene el potencial de crear nuevos puestos de trabajo, transformar las estructuras organizativas.

Este nuevo estudio revela que la mayoría de los líderes empresariales cree que los puestos de nivel básico podrían ser más autónomos y evolucionar hacia puestos directivos de primera línea en los próximos tres años. Teniendo esto en cuenta, la proporción de directivos en equipos en todas las funciones podría aumentar del 44% al 53% en los próximos tres años. Únicamente el 18% de los líderes y directivos estima que la Gen AI reducirá los mandos intermedios.

Los empleados consideran que, en los próximos 12 meses, las herramientas de IA generativa podrían suponer un ahorro medio de tiempo del 18% para los trabajadores de nivel básico. Lo que implica que podría haber mejoras significativas en la productividad de los empleados más junior. El 81% de los líderes y directivos confía en que surjan nuevas funciones para los empleados en el nivel básico, como data curators o curadores de datos, especialistas en ética de la IA y formadores de algoritmos.

De copiloto a copensador

“Las herramientas de IA generativa están cada vez más orientadas a ayudar en tareas de gestión complejas, lo que podría desafiar el statu quo de la estructura organizativa y las formas de trabajar”, subraya Roshan Gya, director general de Capgemini Invent.

“La IA generativa tiene el potencial de pasar de ser un copiloto a un co-pensador, capaz de colaborar estratégicamente, añadiendo nuevas perspectivas y desafiando suposiciones. Este cambio podría generar un valor significativo cuando se adapte a casos de uso de negocios específicos, pero depende de varios factores, incluidas las organizaciones que priorizan la construcción de las habilidades y la preparación de los empleados, tomando medidas proactivas en torno a la adquisición y el desarrollo del talento”.

Todavía hay una brecha significativa en el uso real

El informe concluye que la Gen AI está cambiando la visión de las funciones directivas y de liderazgo futuro para hacerlas más estratégicas. El 65% de los líderes y directivos encuestados ve un gran potencial para tareas estratégicas complejas. Más de la mitad piensa que los directivos desempeñarán un papel fundamental como catalizadores del cambio. La tecnología también podría ahorrar a los líderes y directivos hasta siete horas a la semana, y casi 8 de cada 10 líderes estiman que la Gen AI tendrá un impacto positivo en su productividad en los próximos 12 meses.

Aunque las perspectivas de adopción de la Gen AI en el trabajo son buenas, existe una brecha significativa entre el potencial y el uso real. A pesar de que el 97% de los directivos y gestores afirme haber experimentado con herramientas de Gen AI, sólo el 15% reconoce que las utiliza al menos una vez al día en su trabajo.

La IA generativa puede ampliar el alcance estratégico de las funciones directivas

Actualmente, los directivos dedican más de un tercio de su tiempo a tareas administrativas. Aun así, la capacidad de la IA para automatizar gran parte de este trabajo ofrece oportunidades para centrarse en tareas de planificación estratégica y resolución de problemas. Más de tres cuartas partes (78%) de los líderes y directivos estiman que, en los próximos tres años, la IA generativa aumentará su capacidad de resolución de problemas y toma de decisiones, y más de la mitad sostiene que los puestos directivos evolucionarán hacia la especialización. El 57% de los directivos de organizaciones que se encuentran en una fase avanzada de implantación de la IA generativa ya están comprobando cómo sus funciones son cada vez más estratégicas.

Las estructuras organizativas deben transformarse 

Para casi la mitad (46%) de los equipos, la IA se utiliza simplemente como una herramienta para mejorar las capacidades y los flujos de trabajo existentes. Sin embargo, se está empezando a implementar la colaboración entre humanos y máquinas. Uno de cada tres equipos utiliza actualmente la IA como “miembro del equipo”, por ejemplo, mejorando el rendimiento humano o utilizando agentes de IA para completar tareas predefinidas sin intervención humana.

Según la investigación, hoy en día la IA se utiliza como supervisor en sólo el 1% de los equipos, es decir, dirige, asigna o prioriza el trabajo de los humanos. Por el contrario, en los próximos 12 meses, el 13% de los equipos espera utilizar la IA en esta función. En un entorno dirigido por la IA, el juicio humano es cada vez más importante y la mayoría de los líderes, directivos y empleados que participaron en la investigación así lo reconocen.

La formación y la orientación de los directivos

A pesar del potencial de la IA generativa para aumentar la productividad en todas las funciones laborales, su adopción sigue siendo incipiente. Mientras que casi dos tercios (64%) de los trabajadores ya utilizan herramientas de Gen AI para su trabajo, sólo el 20% de los empleados las usa a diario.

La mayoría de los empleados carece de la formación necesaria

Los empleados también carecen de competencia en habilidades clave, y sólo el 16% considera que está recibiendo el apoyo que necesita para desarrollar habilidades de Gen AI. Únicamente el 13% de los empleados admite que posee habilidades de conversación de las máquinas; sólo un tercio declara que pueden gestionar los riesgos sistémicos de Gen AI; y menos de la mitad señala que tiene habilidades de ingeniería rápidas. El informe sugiere que los miembros del equipo deben tener las habilidades de IA adecuadas, definiendo normas y responsabilidades para la colaboración conjunta entre humanos y Gen AI, asumiendo la responsabilidad cuando los sistemas de IA generativa cometen errores, y adaptando los flujos de trabajo y procesos para la nueva era de Gen AI.

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