En 2014 se denunciaron más de 20.500 delitos de este tipo en España

El uso de la tecnología en las actividades diarias es cada vez más frecuente. Sin embargo, todavía muchos usuarios no son conscientes de los riesgos a los que se exponen en la red. Los delitos informáticos crecieron, en 2014, un 71,2% respecto al año anterior, según datos recogidos en la Memoria de la Fiscalía General del Estado.

Los delincuentes informáticos aprovechan el desconocimiento de las personas sobre determinados aspectos técnicos para extraer los datos necesarios para cometer el delito. En total, el año pasado se denunciaron 20.534 ciberdelitos, de los cuáles el más frecuente fue el de estafa (en un 84%): venta de productos o servicios fraudulentos, phishing, uso de tarjetas de crédito, entre otras.

Pese a este considerable aumento, en la actualidad, existen ciberataques de menor importancia en los que la víctima prefiere no denunciar el ataque. Por ello, AXA Assistance recuerda que frente a un delito informático el primer paso es informar a la policía y realizar una denuncia.

Asimismo, conscientes del papel clave que desempeña actualmente la tecnología en la vida de las personas y del rol crucial que adoptará en el futuro, AXA Assistance alerta de la importancia de contar con el apoyo de expertos profesionales que ayuden a resarcir de inmediato el daño ocasionado.

En caso de disponer de un seguro jurídico con coberturas, el afectado debe comunicar el delito causado para que la compañía aseguradora active los mecanismos necesarios que restituyan el perjuicio. Por ejemplo, en caso de difamación de la persona a través de un blog, AXA Assistance se encarga de ofrecer apoyo psicológico a la víctima, siempre que la familia lo estime oportuno, reclamar la retirada de los contenidos nocivos y, en caso de negación por parte del autor de la calumnia, crear contenidos que hagan retroceder la página en la que se han vertido los insultos.