El volumen de facturación total alcanza los 17.673 millones de euros y el ahorro gestionado por el negocio de vida aumenta un 2,22% y rebasa los 185.000 millones
Los ingresos de las aseguradoras por la venta de pólizas a cierre del pasado marzo ascendieron a 17.673 millones de euros, un 4,57% menos que un año antes. De este importe, 9.593 millones de euros correspondieron al ramo de no vida, un 3,93% más que un año antes, y los 8.080 millones restantes al de vida, que cae un 13,02% respecto a marzo de 2017, según muestran los datos provisionales recabados por Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (Icea).
Icea e Unespa fundamentan la mejora del ramo No Vida “en el tirón de todas las líneas de negocio, con mención especial de las pólizas de salud y las denominadas resto no vida”. Así, la partida de seguros de salud repuntó un 5,59%, hasta los 2.228 millones. Mientras, la línea de negocio calificada como “resto no vida” –que engloba las pólizas más ligadas a la actividad económica– creció un 4,47%, hasta los 2.534 millones.
Las pólizas de automóviles y del ramo de multirriesgos tuvieron, igualmente, un desempeño destacado. Los seguros de automóviles aumentaron su facturación en un 2,93%, hasta los 2.919 millones, y siguen siendo los que más ingresos reportan de todo el bloque de no vida.
La categoría multirriesgos incrementó por su parte sus ingresos en otro 2,87%, hasta los 1.912 millones. Bajo este término se incluyen las pólizas de hogar, comunidades de vecinos, comercios e industrias.
Aunque la patronal del sector e Icea no explican los motivos del descenso de la facturación del ramo de vida, sí destacan que el ahorro gestionado en productos de seguro de vida, medido a través de las provisiones técnicas, alcanzó los 185.080 millones de euros a cierre del primer trimestre del año. Este importe supone un incremento interanual del 2,22%, de acuerdo con las estimaciones de Icea.