La Confederación Panamericana de Productores de Seguros, Copaprose, celebró la semana pasada su XXVII Congreso Panamericano en Costa Rica.
Organizado de forma conjunta con CIS y la Cámara de Productores de Seguros del país, el evento reunió en torno a 400 asistentes, mayoritariamente del país anfitrión, con un 20 % de asistencia internacional, entre ellos una representación del Consejo General español.
Tras la bienvenida institucional por parte del presidente del CIS, Marvin Umaña, el presidente de COPAPROSE, Francisco Machado, y el ministro de la Presidencia del país anfitrión, Sergio Alfaro, el español Marcos Urarte fue el encargado de realizar la conferencia inaugural sobre el entorno en el que conviven hoy las empresas. Urarte destacó la necesidad de la transformación digital, centrándola básicamente en dos objetivos principales: la experiencia-cliente, dándole más valor, y la creación de nuevos modelos de negocios.
Tendencias de regulación de seguros
Tras otras interesantes conferencias, una de las sesiones que levantó mayor expectación fue sobre la regulación de los seguros que contó con la participación de especialistas de distintos países. Bajo el título Tendencias de la regulación de los seguros, se estableció un debate muy interesante, dadas las distintas posiciones planteadas. Intervinieron Francisco Machado; Elena Jiménez de Andrade, presidenta del Consejo General, en representación de España; Tomás Soley, superintendente de Seguros de Costa Rica; Armando Vergilio, presidente de Fenacor de Brasil; y Marvin Umaña.
Intervino en primer lugar Marvin Umaña, que recriminó a la administración pública su obsesión por regular. “Necesitamos flexibilizar la normativa si queremos crecer. La hiperregulación que estamos viviendo es muy cuestionable, porque no aporta la efectividad que debería darle naturaleza: encarece los costes”. La afirmación de Marvin Umaña fue en punto de partida de un debate intenso ya que, mientras los corredores defendían la tesis de la conciliación de protección y regulación, el superintendente indicaba que la baja penetración del seguro en Latinoamérica no era resultado de la regulación, sino de otros parámetros que los corredores no consideraban, tales como la cultura del seguro, desigualdades sociales, tipología de productos, mercado de la distribución, etc.
Armando Vergilio quiso introducir un planteamiento distinto, hablando del “sancionamiento cero”. Vergilio, presidente de los corredores de Brasil, y ex superintendente a la vez, afirmó que inicialmente se pensaba que el “sancionamiento cero’ era el objetivo, hasta que se dieron cuenta de que era imposible. En este sentido, explicó que “para proteger a la sociedad, ofrecer garantías a los corredores, desarrollar mercado, la mejor supervisión es la preventiva, nunca la punitiva”. Sin embargo, esta tesis fue replanteada automáticamente por el propio Vergilio, al afirmar que en un mercado con más de cien mil corredores, es imposible la supervisión preventiva, por lo que propuso la autorregulación con supervisión estatal.
Por su parte, Elena Jiménez defendió la poca utilidad de establecer separaciones, ser ‘frentistas’ y la tesis de que “cuando hablamos de regulación no hay que hablar únicamente de supervisores, todos los actores del seguro tienen que ser protagonistas”. Expuso la idea de un trabajo colectivo, manteniendo las singularidades, pero evitando los enfrentamientos. En este sentido, explicó que la nueva directiva europea ofrece expectativas positivas, “porque, si bien supone una mayor carga, nivela las exigencias”.
La sesión dio paso al trato de otros temas como el control de lavado de dinero, tecnología versus regulación y los seguros ‘obligados’ de la banca. El debate final fue, precisamente, para el seguro bancario: la venta ‘atada’ que llaman los costarricenses, la venta ‘casada’ que dicen los brasileños o la venta ‘vinculada’ que expuso Elena Jiménez de Andrade.
En cualquier caso, hubo coincidencia general del abuso de la banca, si bien las reacciones son distintas según el país. En Brasil, el consumidor no acepta este seguro si es obligatorio, mientras que en España, expuso la presidenta del Consejo General, pronto será una ‘venta combinada’, en la cual el consumidor podrá elegir a su mediador. En este sentido, se calificó el proceso legislativo español como de ‘disruptivo’ porque se avanza a otras realidades y ofrece soluciones a quienes mantienen discusiones superadas en Europa.
Durante el segundo día del congreso se trataron también temas de actualidad del seguro y su intermediación como las nuevas tecnologías, la penetración del seguro en el mercado latinoamericano o el fenómeno insurtech.
En la clausura, Marvin Umaña y Francisco Machado agradecieron a los asistentes su participación en este encuentro e invitaron a todos al próximo Congreso Regional, a celebrar en Bolivia los días 30, 31 y 1 de noviembre.