“Hoy en día tenemos más poder computacional en nuestros bolsillos que el que fue necesario para llevar al primer hombre a la luna”. Ésta fue la principal reflexión de Jeffrey Rogers, director de Faculty & Facilitator Development de Singularity University, sobre el crecimiento exponencial de la innovación tecnológica en los últimos años y cómo ello afectará a la sociedad, al trabajo y al propio sector.
Fue la tendencia más comentada en el marco de la primera jornada del SU Spain Summit 2019, organizado por un equipo de Talent Garden, con la colaboración de Deloitte, Vodafone, Asisa y CEOE Formación.
La cita reúne durante dos días en Madrid a expertos de Silicon Valley, con el objetivo de dar las claves de la innovación y el crecimiento tecnológico que ayudarán a crear un cambio positivo en el mundo. “Queremos involucrar a los líderes locales para que entiendan el potencial de las tecnologías exponenciales”, afirmaba Diego Rodrigo Gil Hermida, Managing director y fundador de SingularityU Spain Summit. “Nos reunimos porque, juntos, representamos la comunidad de innovadores y de personas que cambian las reglas del juego”.
Durante la primera jornada se habló de las últimas tendencias en el sector como el futuro del puesto de trabajo, la descentralización o la innovación exponencial.
Ramez Naam, futurólogo y director de Apex Nanotechnologies, destacó que el crecimiento exponencial en la innovación tecnológica se da más fácilmente en aquellas empresas que arriesgan y no tienen miedo a experimentar pese a los posibles fallos. “Si las compañías más innovadoras necesitasen el permiso de mucha gente, sus ideas no progresarían y no se producirían”, señaló Naam. “Este tipo de empresas tienen una experimentación absoluta y ningún miedo al fracaso. Amazon, por ejemplo, solo ha conseguido mejorar un 1% de veces con sus nuevas ideas”.
Ser disruptivos también es clave en el nuevo mercado laboral, según Bohdanna Kesala, que gracias a atreverse a experimentar pasó de “ser pintora a presentar eventos y reuniones en todo el mundo” de la mano de los Summits Internacionales de Singularity University.
Por su parte, el estratega y cofundador de Doblin Inc, Larry Keeley, también aseguró creer que la innovación es un factor clave dentro del desarrollo de las empresas modernas, aunque para él su significado cambia. “Hoy en día, la innovación moderna requiere más elegancia que invención de cero”, explicó, añadiendo que “la innovación no viene de genios, sino de gente que quiere solucionar problemas”.
Esta forma de focalizar la innovación ha sido fundamental a la hora de construir el éxito de famosas startups y empresas en los últimos años para Patrick van der Pijl, CEO de Business Models Inc. “La mejor forma de innovar es utilizar productos existentes y trabajar para que aumenten su utilidad”, destacó el empresario neerlandés, que también resaltó el efecto en red o network effects como un elemento común en muchas empresas innovadoras. “Plataformas como Uber Eats, por ejemplo, han logrado crear nuevos segmentos de cliente para un modelo de negocio”.
Pero ¿cómo añadir el factor innovador en las empresas? ¿Cuál es la capacidad más buscada para crear equipos innovadores? Larry Keeley tiene la respuesta. “Si queremos que todo cambie, lo más sencillo es contar con gente curiosa que plantee retos y que los directivos no se dediquen solo a echar un vistazo a sus ideas. No se puede centralizar el flujo de ideas en la empresa”, argumentaba.
Descentralización tecnológica y derechos humanos
La descentralización fue otro de los puntos clave en la primera jornada de SingularityU Spain Summit. Un tema muy conocido para David Orban, emprendedor y fundador de Network Society Ventures, sociedad de inversión centrada en proyectos dirigidos a redes descentralizadas. Según Orban, muchos cambios positivos se deben a este fenómeno: “la descentralización tecnológica ha favorecido un acceso a la educación donde antes no la había”.
De opinión muy parecida fue Alex Gladstein, experto en la relación entre derechos humanos y tecnología. Para el activista la descentralización de las redes será clave en el avance de países autoritarios o en vías de desarrollo. Frente a las apps que monitorizan todos los datos personales Gladstein defiende el uso de tecnologías descentralizadas como la criptomoneda Bitcoin, que para él “hará que la acción de intermediarios bancarios y gubernamentales sea nula y por tanto, evitaría acciones como la congelación de divisas por parte de gobiernos no demócratas”.
El futuro del trabajo
La innovación aplicada a los puestos de trabajo también tuvo su protagonismo dentro de la primera jornada de SingularityU Spain Summit. En este sentido John Hagel, copresidente del Center for the Edge en Deloitte sostuvo que “los grandes cambios crean grandes oportunidades, pero también grandes presiones, ya que la competencia es feroz”. Un factor que se soluciona aplicando métodos de aprendizaje escalable, es decir, que añadan valor en un mundo cambiante y permitan adquirir conocimientos en el puesto de trabajo y no en la sala de formación, según Hagel. “Hay que recordar que, independientemente del número de gente inteligente en nuestra empresa, habrá muchos más fuera de nuestra organización”.
El CEO de T Labs, Amin Toufani, afirmó que los avances tecnológicos en las empresas afectarán principalmente a la forma de trabajar de sus empleados. “El 76% de las personas prefiere trabajar a solas que en equipo, por lo que las compañías deberían redefinirse para ser un ecosistema de hipercoordinación en vez de colaboración”, destacó, poniendo como ejemplo los puntos de pit stop en la Fórmula 1. En este sentido, definió a Amazon y Alibaba como “empresas que combinan todas las facetas del mercado para trabajar de forma muy coordinada como un sistema operativo”.
Por último, el cofundador de Nativa, Eric Ezechieli, quiso reseñar que, en tiempos de avances tecnológicos, hay que “transformar radicalmente los modelos de negocio para garantizar la sostenibilidad de nuestro planeta, que se encuentra por encima de su límite”. Para ello, Ezechieli propone aplicar sistemas de economía circular, es decir, “aquellos que reducen residuos, ya que los bienes circulan constantemente entre sectores”.