Asisa ha participado en la II Cumbre Ibérica de la Sanidad Privada celebrada en Lisboa. El encuentro ha sido organizado por Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) y la Asociación Portuguesa de Hospitales Privados (APHP).
Por parte de la aseguradora ha participado la Dra. María Tormo Domínguez, directora de Planificación y Desarrollo, que intervino en una mesa dedicada a los Subsistemas sanitarios. También participó el economista Fernando Ribeiro Mendes.
La Dra. Tormo centró su intervención en los conciertos suscritos entre las mutualidades administrativas españolas y las entidades aseguradoras. Analizó las características de esos conciertos, haciendo hincapié en la cartera de servicios y su distribución atendiendo a la población general y al número de beneficiarios, las primas, los objetivos de calidad y los datos de elección de los funcionarios.
Un sistema de salud enfocado en el paciente y en los resultados
Las patronales organizadoras de la cumbre, la APHP y ASPE, han firmado un manifiesto conjunto bajo el título Un sistema de salud enfocado en el paciente y en los resultados. En el documento apelan a la necesidad de situar al paciente en el centro del sistema sanitario para aumentar el valor, la calidad y la eficiencia ycontribuir a su sostenibilidad.
Principios para una política sanitaria centrada en los ciudadanos y los resultados
Para Cristina Contel, presidenta de ASPE, “lo más importante para el paciente no es a quién pertenece el servicio de salud que utiliza, sino más bien temas como la calidad del tratamiento, los tiempos de espera y la financiación de la atención de salud”. Óscar Gaspar, presidente de APHP, destaca que “Portugal y España están en condiciones de iniciar un nuevo ciclo de políticas públicas en el campo de la salud, centrada en los ciudadanos y los resultados”.
Una docena de principios
- Asumir la salud como una prioridad nacional en cada uno de los países para responder a los desafíos demográficos, tecnológicos y de las legítimas expectativas de los ciudadanos.
- Hacer del valor para el paciente el objetivo central de todas las reformas.
- Proporcionar mayor responsabilidad y libertad de elección al paciente en su salud, tratamiento y cuidado (financiación adecuada, promoción de seguros de salud, etc.)
- Promover la igualdad en las condiciones de acceso de los ciudadanos y en las condiciones de concesión de licencias a los prestadores, en términos de identidad de requisitos y exigencias entre prestadores públicos y privados en el acceso, realización, y control de la actividad asistencial.
- Mejorar la recogida, el tratamiento y la transparencia de los datos e indicadores del sector sanitario, para favorecer la toma de decisiones informada de los pacientes y los donantes.
- Promover la competitividad entre los proveedores, así como entre los financiadores de los sistemas sanitarios.
- Simplificar la burocracia y reducir los costes de contexto que distorsionan el mercado e inhibe la inversión privada en salud.
- Racionalizar los servicios y consolidar las infraestructuras de salud, para mantener el modelo de salud universal.
- Aprovechar los recursos ya existentes en el sistema de salud.
- Apostar por la tecnología como medio para la prestación de asistencia sanitaria de proximidad y para la reducción de costes.
- Fortalecer la misión de una autoridad reguladora verdaderamente independiente.
- Disociar las funciones de financiador y de prestador de los servicios.
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