Mapfre baja puestos en la clasificación anual de compromisos contra el cambio climático de las principales aseguradoras.
Las principales aseguradoras internacionales están dejando de asegurar nuevos proyectos de petróleo y gas. La idea es alcanzar las restricciones adoptadas en relación con el carbón.
El sector asegurador tiene un papel clave en la transición hacia una economía con bajas emisiones de carbono. Para ello debe alinear su negocio con el objetivo de frenar el aumento de la temperatura mundial.
Insure Our Future sostiene que las aseguradoras deben abandonar por completo los combustibles fósiles y demostrar que el sector está comprometido con los objetivos climáticos.
2022 Scorecard on Insurance, Fossil Fuels and the Climate Emergency
El informe Scorecard on Insurance, Fossil Fuels and the Climate Emergency analiza las políticas de las 30 principales aseguradoras internacionales en relación con los combustibles fósiles. En el mismo se observa que Mapfre ocupa el décimo puesto en materia de suscripción y el décimo segundo en materia de desinversión. Esto supone un retroceso con respecto a 2021.
Si bien los nuevos compromisos adoptados por la aseguradora española suponen una mejora, se quedan por debajo de las mejores prácticas del sector entre sus homólogos europeos.
Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente (IIDMA)
El IIDMA también aboga por la descarbonización de las carteras aseguradoras en línea con los objetivos climáticos. El pasado mes de junio publicó un informe en el que se analizan los avances y puntos débiles de los nuevos compromisos de Mapfre.
Quentin Aubineau, abogado ambiental del IIDMA, señala: “Es fundamental que las aseguradoras dejen de apoyar a las compañías que cuentan con planes de expansión basados en combustibles fósiles. De lo contrario, no pueden pretender reducir su exposición a compañías intensivas en carbono cuyas actividades son incompatibles con la consecución de los objetivos del Acuerdo de París”.
Los seguros, el talón de Aquiles de los combustibles fósiles
En el contexto internacional, Allianz, AXA y Axis Capital son las mejor posicionadas por sus políticas de abandono del carbón. Aviva, Hannover Re y Munich Re lo son en cuanto a petróleo y gas.
En la parte más baja de la clasificación se encuentran las compañías que todavía no han adoptado medidas de restricción a proyectos de combustibles fósiles: las estadounidenses Berkshire Hathaway y Starr o la bermudeña Everest Re. La aseguradora británica Lloyd’s of London también obtiene una puntuación muy baja por haber anunciado su salida del carbón para 2020 y posteriormente declararlo “opcional”.
Liberty Mutual, Chubb y Tokio Marine han adoptado algunas restricciones al carbón, pero siguen asegurando activamente a la industria del petróleo y el gas. Las aseguradoras chinas PICC y Sinosure no han adoptado ninguna restricción a los combustibles fósiles pero se han comprometido a no asegurar nuevas centrales de carbón en el extranjero.
Peter Bosshard, coordinador internacional de la campaña Insure Our Future, considera que «los seguros son el talón de Aquiles de la industria de los combustibles fósiles, por lo que el sector asegurador tiene el poder de acelerar la transición energética”.
Catástrofes climáticas
Los desastres naturales producidos como consecuencia del cambio climático causaron pérdidas al sector asegurador por valor de 280.000 millones de dólares en 2021. Son los datos que refleja un estudio de Munich Re.
Ante esta situación, algunas compañías —en particular Munich Re, Swiss Re y Hannover Re— están aumentando las tarifas a sus clientes para la cobertura de este tipo de catástrofes y/o retirándose por completo de zonas muy expuestas a riesgos climáticos. Insure Our Future considera que este aumento de costes debería ser cubierto por las empresas contaminadoras.
Otra de las cuestiones que puede extraerse de este análisis es que la falta de acción voluntaria por parte del sector asegurador ha puesto de manifiesto la necesidad de una mayor regulación. «La emergencia climática es la crisis que define el siglo XXI y los reguladores deberían actuar con la misma decisión con la que han respondido a la guerra de Ucrania. Deberían obligar las aseguradoras a alinear sus actividades con un escenario 1.5ºC”, concluye Ariel Le Bourdonnec, activista de Reclaim Finance.
También te puede interesar:
- PwC estima en 183.000 millones hasta 2040 el negocio asegurador asociado al cambio climático
- La DGSFP pide al seguro “liderazgo” para afrontar el cambio climático y la longevidad