El informe de Marsh & McLennan Companies y la empresa FireEye, “Ciberriesgo: las inversiones han cambiado para los Consejos de Administración”, presentado en Davos, identifica las tendencias que complican la nueva realidad cibernética
Según el documento, dos tendencias principales dificultan un panorama ya de por sí complejo. En primer lugar las nuevas regulaciones en Europa (y otros lugares), pues obligan las empresas a adoptar prácticas de seguridad más rigurosas para proteger los datos y sistemas. Tampoco ayudan los ataques cibernéticos. Cada vez más frecuentes y destructivos, amenazan a los activos digitales además de provocar daños materiales y lesiones corporales.
Los tres grandes eventos cibernéticos de 2017 sirvieron de precedente para reflejar el alcance geográfico e industrial y el impacto de los daños provocados por los ciberataques: paralización del negocio, pérdidas económicas y daños reputacionales y de imagen en el mercado. “El modelo de negocio está cambiando sustancialmente en la sociedad actual cada vez más digitalizada en la que, los bienes intangibles tales como las marcas, la reputación y la información han pasado a ser los activos más importantes de las compañías”, explica Sara Muñoz, responsable del departamento de cyber de Marsh España.
Teniendo en cuenta que los líderes empresariales pueden no estar familiarizados en la gestión de estos riesgos, el informe de Marsh & McLennan Companies y FireEye analiza cómo los ejecutivos y miembros del comité de dirección pueden tener una mejor comprensión de la nueva realidad cibernética a través de acciones específicas en las áreas de tecnología, la concienciación en el ámbito laboral, colaboración entre entidades gubernamentales y empresariales y mayor supervisión de la gestión de riesgos.