Un año después de que estallara la crisis sanitaria por el coronavirus, la estabilidad económica española pende de un hilo. A finales de año más de 200.000 empresas habían desaparecido y más de 323.000 autónomos dejaron de cotizar en este régimen, según datos del INE. El 92% de las empresas que cerraron eran micropymes (21,5% del mercado), y el volumen de parados, hoy en día, roza los 4 millones. Estos datos muestran la delicada situación económica del país que, lejos de recuperar los niveles de solvencia de antes de la crisis del 2008, se han visto abordadas por una crisis sin precedentes que las sitúa nuevamente con falta de liquidez e insolvencia, explica CIAC.
Ni los créditos ICO, ni los ERTE, ni las moratorias de impuestos, valorado todo ello en 120.000 millones de euros, han servido para recuperar ni mucho menos la economía. Por ello, para ayudar a reparar los daños económicos y sociales derivados de la pandemia, la Unión Europea ha acordado un plan de recuperación para conseguir salir de esta crisis. Pero este paquete de medidas ha aterrizado en España siendo nuevamente problemático entre los socios de gobierno, sin importar apenas las dificultades que los españoles están sufriendo, añade CIAC.
CIAC analiza las ayudas para la reconstrucción
Las ayudas europeas constan de 11.000 millones distribuidos en tres fondos: uno de 7.000 millones directo para empresas y autónomos, con el que pagar facturas y deudas; otro de 3.000 millones para la reestructuración de los créditos con aval del Estado y gestionado a través de la banca; y un tercero de 1.000 millones gestionado por Cofides para reforzar el balance de las empresas de mediano tamaño.
Con esta nueva remesa de ayudas, CIAC, la Coordinadora Independiente de Asociaciones de Corredores, denuncia que nuevamente la banca intervenga en la distribución de estos fondos europeos. “Teniendo como precedente la problemática de los primeros créditos ICO, con los que los bancos aprovecharon para imponer seguros a sus clientes, resulta inasumible que otra vez se encarguen de gestionarlos”, indica la asociación.
CIAC denuncia las malas prácticas de la banca
“Durante meses, las entidades bancarias han continuado abusando de su poder, ya no solo con los créditos ICO sino también con la subida de comisiones. Su estrategia: si no vinculas un seguro al crédito, te lo niegan; si contratas el seguro de vida con nosotros, te ahorras la subida de comisiones. Y así, de todos los colores”.
Lo que reclaman los distribuidores de seguros es que los organismos oficiales y regulatorios frenen estas actitudes de la banca. Si bien es cierto que la banca ha creado un código de buenas prácticas de adhesión voluntaria, desde CIAC piden a las autoridades que, “si realmente es imprescindible su intervención en el reparto de los créditos, se vigile el cumplimiento de los derechos de los consumidores y las obligaciones de la banca”.
CIAC tiene en marcha las campañas #consultacontucorredor y #cuéntanostucaso. Para denunciar las conductas ilícitas e ilegales que está desarrollando la banca con sus clientes y defender la figura del corredor de seguros.
También te puede interesar:
- Las inversiones del seguro cierran 2020 en 335.607 millones de euros
- Allianz Partners premia a sus mejores proveedores de Asistencia en Carretera