En España hay más de 3 millones de trabajadores autónomos, una cifra que se mantiene pese a la situación económica adversa que ha traído consigo la crisis sanitaria. Estos números muestran que este colectivo es uno de los pilares fundamentales de la economía y de la creación de empleo y riqueza en nuestro país. En este contexto, y tras escuchar las preocupaciones más recurrentes y demandadas por los trabajadores por cuenta propia, Nationale-Nederlanden ha actualizado su producto Contigo Autónomo, centralizando las coberturas personales y profesionales de los autónomos en una única solución.
Las cinco preocupaciones de los autónomos
Sin embargo, también han manifestado tener muchas inquietudes, incrementadas por las repercusiones de la actual pandemia, necesitando más que nunca sentirse protegidos.
La continuidad de su negocio
Una de las mayores preocupaciones señaladas por los trabajadores autónomos es la de enfermar, ya no solo por motivos de salud sino, también, por cuestiones económicas. Mientras los trabajadores asalariados pueden contar con la seguridad y respaldo de su empresa, incluso si durante un tiempo no pueden trabajar por una causa justificada, los ingresos del autónomo son irregulares y no están garantizados.
Si no puede trabajar a causa de una enfermedad, las ganancias no se generan, pero los gastos, sin embargo, no paran. Además, piensan que, al tomarse un tiempo de baja, corren el peligro de perder los clientes que tanto esfuerzo les ha costado conseguir.
La conciliación de su vida laboral y familiar de los autónomos
Los ingresos de los autónomos dependen de sus clientes y, por ello, su vida gira siempre en torno a ellos. Para conseguir la satisfacción del cliente, muchas veces, faltan horas en el día. Esto hace que el autónomo no pueda regirse por las 40 horas semanales establecidas para un trabajador por cuenta ajena. Ya que su límite es el que su negocio requiera. Como consecuencia, el tiempo que puede dedicar a su vida personal y familiar se ve significativamente reducido. Y puede repercutir negativamente tanto en sus relaciones personales como en su bienestar físico y emocional.
El futuro de los autónomos y el de sus familias
Una de las mayores preocupaciones que sufren los autónomos tiene que ver con su jubilación. Un reciente estudio de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos pone de manifiesto que la pensión media que reciben los autónomos es de unos 420 euros menos que las de los trabajadores asalariados. 709 euros frente a 1.129 euros.
Por ello, es más que probable que el autónomo pierda poder adquisitivo tras su jubilación. Y que su calidad de vida y la de su familia se vean mermadas. Por ahora, los autónomos cuentan con dos formas de enfrentarse a esta cuestión: realizar aportaciones complementarias a sus cotizaciones para incrementar sus bases; o contratar un plan de pensiones individual con incentivos fiscales.
Cumplir con sus obligaciones fiscales y legales
Los autónomos se enfrentan a una larga serie de deberes fiscales y legales. La fiscalidad que atañe al autónomo es compleja: seguridad social, IRPF, IVA, IGIC, retenciones, cuotas, etc., unas obligaciones impositivas, variables en el tiempo, que siempre tienen que estar en regla y al día. Lo mismo sucede con las cuestiones legales, difícilmente una persona puede ser experta en derecho y en su campo profesional al mismo tiempo, y el entresijo legislativo que envuelve al autónomo es espinoso. Todo esto es señalado como uno de los problemas más habituales, que puede significar un gasto importante en tiempo y recursos. Por ese motivo, la gran mayoría de los autónomos recurre a ayuda externa en forma de gestorías o asesorías para poder dedicar el 100% de su tiempo a generar negocio, ya que no disponen de departamentos legal y financiero como en una gran empresa.
Tener su negocio al día y adaptado a los nuevos tiempos
Al reto de mantener el negocio a flote al tiempo que superar la crisis actual, se suman otros como la digitalización, la innovación y la adaptación a un nuevo contexto socioeconómico; nuevas demandas de un mercado que se hacen imperiosas y que, hoy día, están directamente vinculadas a la productividad y la continuidad de un negocio. Así, la transformación y la adecuación digital del negocio, es otra de las cuestiones que más preocupan a nuestros autónomos, en gran parte porque escapan a sus ámbitos de conocimiento.
También te puede interesar:
- La Fundación Aon España entrega la Distinción 2019 al Consorcio
- El seguro factura un 0,32% menos hasta marzo