El coste de morirse en España es significativamente diferente dependiendo del lugar del fallecimiento. Madrid y Palma de Mallorca son las dos capitales de provincia donde los servicios funerarios resultan más caros, 4.750€ y 4.250€ respectivamente; frente a lugares como Zamora, Santa Cruz de Tenerife, Cuenca, Teruel, Cádiz o las Palmas de Gran Canarias, donde los mismos servicios no sobrepasan los 3.000€, según datos de la aseguradora Axa.
El lugar donde resulta más caro un sepelio es Ibiza. Allí, el precio de los servicios funerarios que conlleva un fallecimiento puede superar los 5.000€, un 60% más que en los municipios más económicos. “La concienciación sobre principios como la preservación del medioambiente puede trascender a las personas más allá de su vida”, asegura Jesús Carmona, director de Vida, Salud y Accidentes de Axa.
En los ecofunerales, los féretros están elaborados con maderas de certificación ecológica; los barnices tienen como origen una base acuosa y textil de fibra natural; las urnas son biodegradables de materiales naturales o reciclados, los ornamentos son vegetales sin espuma floral, metales ni plásticos, los recordatorios de papel reciclado y las sábana 100% fibra natural con certificados sin tóxicos.
En virtud del acuerdo suscrito entre Axa y DKV, ambas compañías son las primeras en ofrecer a sus asegurados una póliza de decesos orientada a minimizar el impacto ambiental del deceso. Un servicio que está disponible para los sepelios que tengan lugar en Barcelona, Cádiz, Málaga, Alicante o Valencia.