Santalucía, en su compromiso por proteger la salud y el bienestar de sus trabajadores, ha anunciado que asumirá el pago de la prima y el riesgo de un seguro de vida colectivo creado específicamente para proteger a más de 2.500 empleados de Albia (servicios funerarios) y Ballesol (residencias geriátricas) que, cada día desde que empezó la crisis sanitaria, ponen en riesgo su salud.
Con el fin de que ningún empleado pueda quedar desprotegido, se beneficiarán de este seguro aquellos trabajadores de las dos compañías que no estén cubiertos por la póliza colectiva que Unespa ha suscrito para asegurar al personal sanitario que se enfrenta al COVID-19, gracias a un fondo de 37 millones de euros aportado por más de un centenar de aseguradoras, en el que también ha participado Santalucía.
Santalucía cubre fallecimiento y hospitalización
Se cubrirá el fallecimiento y la hospitalización de los empleados, cuando sean consecuencia directa del COVID-19, siendo el capital asegurado por fallecimiento 30.000€ por persona y el subsidio por hospitalización de 100€ al día, siempre que el ingreso supere los tres días y con un máximo de dos semanas.
La protección tendrá una vigencia de seis meses a contar desde el 14 de marzo, fecha del inicio del Estado de Alarma y tiene carácter retroactivo. Por tanto, aquellos empleados que hayan iniciado su hospitalización desde esa fecha pueden reclamar el subsidio. Además, los riesgos no son excluyentes, y si el asegurado falleciera, Santalucía abonará la suma de las dos coberturas de forma conjunta.
La póliza será asegurada por Santalucía Vida y Pensiones, especialista en seguros de vida, pensiones, ahorro e inversión, perteneciente al Grupo santalucía, dada su experiencia en gestión de colectivos, explica la compañía.
Esta medida se suma a otras iniciativas que Santalucía ha puesto en marcha en las últimas semanas con el objetivo de ayudar y proteger a sus empleados, colaboradores y clientes, en esta situación sin precedentes provocada por el Coronavirus.
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