Oscaro tiene las claves para proteger el vehículo de las inclemencias ambientales frecuentes en las zonas costeras.
Las zonas costeras presentan unas condiciones climáticas particulares que pueden afectar al rendimiento y la conservación del vehículo. El calor, el salitre y la arena son factores que pueden dañar la carrocería, el motor y el interior del coche. Por ello, es importante seguir unas pautas de mantenimiento para proteger el vehículo de estos agentes externos.
Recomendaciones de Oscaro
- Estacionar el vehículo en un lugar con sombra. La exposición directa al sol puede deteriorar la pintura y el brillo del coche, así como incrementar la temperatura del habitáculo. Si no se dispone de un lugar con sombra, se recomienda usar una capa de cera protectora o una funda aluminizada para cubrir el coche.
- Verificar los líquidos del vehículo. El calor puede provocar la evaporación de los líquidos vitales del coche, como el refrigerante y el aceite del motor. Esto puede ocasionar problemas graves como el sobrecalentamiento o daños en los sistemas de enfriamiento. Se aconseja comprobar los niveles y la calidad de los líquidos antes y después de cada viaje a la playa.
- Proteger la tapicería del vehículo. La arena y el agua pueden deteriorar los tejidos y acabados del interior del coche. Además, pueden generar malos olores por la humedad. Se sugiere secar bien la ropa y quitar la arena antes de entrar al coche. Se aconseja usar fundas o toallas para proteger los asientos si se va mojado. Se recomienda limpiar el interior con espuma en seco o productos específicos para eliminar el salitre.
- Lavar el vehículo con frecuencia. El salitre es un componente que favorece la corrosión de los metales, las gomas y otros materiales del coche. Para evitarlo, se recomienda lavar el coche con agua a presión cada vez que se vuelva de la playa. No se debe frotar la carrocería para no arañarla. Se debe prestar atención a las zonas interiores y a las gomas, donde el salitre puede acumularse más fácilmente.
- Ajustar el sistema de climatización del vehículo. El sistema de climatización es esencial para viajar cómodamente en verano. Se debe comprobar que funciona correctamente y que no tiene fugas de gas refrigerante. No se debe forzar con temperaturas muy bajas, basta con que se regule entre siete y diez grados por debajo de la temperatura ambiente. Así se evitará abrir las ventanas o las puertas en exceso y que entre más humedad y salitre al coche.
Siguiendo estas pautas, se podrá disfrutar de unas vacaciones en la playa sin preocuparse por el vehículo.
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