Marketing Site (Mksite) ha realizado recientemente un estudio en el que analiza cómo se plantean las corredurías de seguros la continuidad del negocio cuando su titular o propietario se enfrenta a la jubilación, en función del tipo de empresa y de si tiene un componente familiar. Puedes ver el vídeo aquí. Puedes ver el vídeo aquí.
El perfil de las entidades que ha respondido a la encuesta es el de corredor de seguros, mayoritariamente con menos de 60 años y con más de 20 años de actividad. La mayoría de las corredurías están constituidas como sociedades familiares. La facturación media ronda entre 1 y 5 millones de euros y cuentan con colaboradores externos.
Sus principales preocupaciones
Las principales preocupaciones de este segmento de corredores son la intervención de la banca en el mercado, la guerra de precios en determinados ramos y el impacto que esto puede causar a la reputación del sector asegurador.
En este sentido, Elena Jiménez de Andrade, presidenta del Colegio de Mediadores de Seguros de Madrid, señala que, como corredor de seguros, “fundamentalmente la preocupación sería seguir creciendo, seguir produciendo, y qué duda cabe, seguir manteniendo la relación estrecha y cercana con nuestro cliente, poniéndolo en el centro de nuestro negocio y manteniendo ese estándar de calidad en la prestación de servicios y orientación personal a nuestros asegurados”.
Además, a las compañías con las que colaboran les piden una menor carga administrativa y ayuda en los procesos de digitalización. Entre las conclusiones del estudio, MK Site observa una oportunidad para aquellas entidades “que apuesten por la ayuda a la profesionalización de las empresas de mediación, que piden claramente ayuda para llegar a ser empresarios 100%; pasando de agentes comerciales a lo que el mercado está demandando: empresarios de la mediación implicados en los procesos que se están abriendo para la mejora de la relación con el cliente”.
Rafael Calderón, director del Canal Corredores/Asociaciones de Reale Seguros, señala que “desde Reale lo que intentamos es darles las máximas posibilidades y herramientas para que el servicio con respecto a sus clientes sea lo más ágil, gestionable; y, sobre todo, que se perciba como una cuestión de ayuda”.
“Es fundamental en este momento el asesoramiento de un profesional para los clientes y esto lo valoran mucho. Nos consta que hay muchos corredores que se han puesto en contacto con sus clientes de forma proactiva. Creo que el corredor ha puesto de manifiesto la diferenciación que tiene con otros distribuidores. Y, por supuesto, desde la visión de Reale lo que vemos es un sector muy profesional, gente que está trabajando de forma dura para defender su cartera y hacer más fáciles a sus clientes las renovaciones. Y sí que es cierto que hay una parte también que se perderá, porque los negocios por desgracia desaparecen”, añade.
Opciones para la continuidad del negocio de los corredores
La mayoría de los corredores de seguros encuestados apuestan por la continuidad de su negocio. Aunque algunos no cuentan con un plan preestablecido, la sociedad familiar parece que es la fórmula más utilizada para apostar por la continuidad de la correduría, sin descartar la integración en agrupaciones de corredurías o la compra de carteras o integración de corredurías para afrontar el futuro.
Del informe se desprende que cada caso es único. Y “forma parte de la historia de cada correduría, por lo que sería difícil encontrar una sola propuesta de interés para todos por igual. No obstante, la agrupación de corredores y el asociacionismo tiene peso en las respuestas. El apoyo de las compañías también se repite y aunque es dispar en cuanto a las peticiones, se centra en seguir adelante”.
En este sentido, Luis López Visús, director general de Espabrok, explica que “la horquilla de situaciones de nuestras corredurías es amplia. Tendríamos en un extremo corredurías que han trabajado desde hace tiempo y que han planificado ese relevo generacional; y tendríamos en el otro lado corredurías que a lo mejor están en una situación de parálisis y de bloqueo. En el sentido de que no tienen identificada la persona o personas que les van a suceder. O que las personas que pueden sucederle se dedican a otro tipo de actividad. O están bloqueados porque necesitan más tecnología e inversiones fuertes; porque sus bases de datos están obsoletas, porque hay una caída recurrente de la facturación. Yo creo que el relevo generacional hay que trabajarlo con tiempo y bien planificado”.
También te puede interesar:
- Mi Legado Digital lleva al sandbox un seguro de Decesos Inteligente
- El grupo Relyens (Sham) se adhiere a los Principios para la Inversión Responsable