Howden Broking Group afirma que está detectando una transición hacia un mercado blando en D&O, según su informe sobre las perspectivas de este ramo para 2022 en la región de EMEA (Europa, Oriente Medio y África). El mediador constata en un comunicado que durante el primer semestre de este año se han estabilizado los precios de las primas de responsabilidad civil de administradores y directivos por el incremento de la competencia a causa, entre otros factores, de la incorporación de nuevos operadores al mercado.

“Incluso -apunta Pablo Fuertes, Head de Líneas Financieras & Instituciones Financieras de Howden Iberia– estamos observando una disminución significativa en aquellos casos en los que los precios de los programas eran demasiado elevados debido al sector, el nivel de crisis o la falta de capacidad”. Una situación que, según el directivo, se empezó a detectar entre 2020 y 2021, cuando el incremento de las primas “se aplanó”.

Howden percibe mayor apetito de las aseguradoras por el ramo

El documento también muestra que esta tendencia está motivada por un aumento del apetito de las aseguradoras y de la capacidad disponible, una oleada de nuevas aseguradoras e iniciativas de capacidad impulsadas por factores ESG que se incorporan al mercado.

Y añade que se prevé que las aseguradoras considerarán las colocaciones a buen precio como nuevas oportunidades de negocio, lo que, a su vez, creará una oportunidad de que los clientes reevalúen las estructuras y límites de sus programas y eliminen del mercado toda capacidad a precios excesivos.

Menos restricciones

Además, observa signos de suspensión en las restricciones en el porcentaje del riesgo asumido. Un aspecto que considera que también generará competencia. “La renovación para el periodo 2022-2023 será una buena oportunidad de que los clientes renueven los límites de sus pólizas y valoren soluciones más innovadoras como una cobertura adicional solo de Side A y un límite de reserva de fondos para los administradores principales”, agrega el informe.

No obstante, señala que existen motivos de preocupación para las aseguradoras de D&O, como son los factores macroeconómicos que puedan generar demandas o tensiones geopolíticas como el conflicto de Ucrania, que puede provocar una recesión mundial, una espiral inflacionista e insolvencias. Estas últimas, junto con las reestructuraciones societarias y los concursos de acreedores, también pueden aumentar significativamente por el fin de los planes de ayuda que los gobiernos aprobaron para paliar los efectos del Covid-19.

Howden analiza las reclamaciones

Asimismo, el informe muestra que las reclamaciones a las aseguradoras por pólizas de D&O continúan siendo elevadas a pesar de la disminución por las reclamaciones de valores estadounidenses y la reducción de demandas contra administradores y directivos. Concretamente, Howden gestionó un 120% más de reclamaciones en 2020 respecto al año anterior y en 2021 un número similar. La causa más habitual de estas fueron las investigaciones reglamentarias, que supusieron un 18% de las notificaciones de reclamaciones de D&O en 2021 y el 53% del total de reclamaciones de ese año.

Repunte de las reclamaciones

De cara a los próximos años, prevé un repunte de las reclamaciones contra quienes dirigen las empresas por cuestiones relacionadas con el ESG, es decir, medioambientales, sociales y de gobernanza. El motivo lo explica Fuertes: “Ya estamos observando ejemplos de casos en los que accionistas u organismos reguladores han puesto en tela de juicio lo declarado por las empresas en materia de ESG”. Sin embargo, el análisis subraya que las empresas con buenas puntuaciones ESG serán capaces de destacar en el mercado, atraer primas favorables y acceder a más capacidad.

Otro gran motivo de preocupación es el continuo impacto de las ciberamenazas para las empresas. Así, el informe destaca que el ransomware (secuestro de datos) y los incidentes de denegación de servicio, si bien no constituyen un riesgo directo para los administradores y directivos, pueden suponerlo para los consejos de administración, “ya sea debido a las violaciones de la seguridad de los datos o a la falta de medidas de protección adecuadas contra las amenazas, así como al posterior impacto en las operaciones, si tuviera lugar un ataque de denegación de servicio”.

Por otra parte, Pablo Fuertes augura que las leyes sobre total transparencia relacionadas con cuestiones de ESG, SPAC (empresas con propósito especial de adquisición) o criptomonedas que ya se están aprobando en EEUU y Reino Unido “acabarán llegando a nuestro país, por lo que no está de más insistir en el valor que supone para los administradores y directivos contar con una cobertura adecuada”.

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