Leyendas urbanas sobre la alimentación

Leyendas urbanas sobre la alimentación

Aunque cada vez más personas quieren comer de forma saludable, las leyendas urbanas sobre la alimentación abundan y se deben a una falta de educación alimentaria.

No siempre hay acceso a información fiable

Internet o las redes sociales no son las mejores fuentes para cuidar la salud y pueden generar confusiones y malos hábitos. Lo ideal es consultar siempre a un profesional que ofrezca unas pautas alimenticias adecuadas para cada persona. “Para una alimentación correcta y saludable es necesario conocer la situación del paciente. Aspectos como la existencia de patologías, intolerancias o alergias, así como los posibles déficits de vitaminas y minerales son cuestiones básicas a la hora de seguir una dieta adecuada”, explica Nuria Cañas Cano, nutricionista de BluaU de Sanitas.

Mitos más extendidos sobre la alimentación

La zanahoria mejora la vista. No hay evidencia científica que lo demuestre. La zanahoria es una buena fuente de vitamina A, relacionada con la salud ocular, pero no puede mejorar la vista por sí sola.

El pan engorda. No hay que eliminarlo de la dieta, aunque es recomendable ajustar la cantidad según nuestras necesidades. Si elegimos un pan con un alto porcentaje de harina integral, será más nutritivo y saciante que el pan blanco.

La fruta después de la comida empeora la digestión. No hay un mejor o peor momento para tomar fruta. Se puede consumir siempre, como postre o snack. La fruta es rica en vitaminas, minerales, fibra y agua, y contribuye a la salud intestinal y estomacal.

El huevo aumenta el colesterol. El huevo es uno de los alimentos más completos y saludables. Su yema contiene colesterol, pero también proteínas, vitaminas y minerales. El aumento del colesterol no depende sólo del consumo de huevo, sino de otros factores como la genética o el estilo de vida. Se puede consumir unos 5 huevos a la semana sin problemas.

Los alimentos integrales ayudan a adelgazar. Los alimentos integrales no tienen menos calorías que los refinados, sino que tienen más fibra. La fibra es beneficiosa para la salud intestinal y general, pero no hace milagros para perder peso.

Es necesario tomar suplementos alimenticios. Los suplementos alimenticios solo son necesarios cuando un profesional lo indique en casos de déficits nutricionales. En dietas variadas y equilibradas no hacen falta suplementos.

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