Según Insure Our Future, Mapfre necesita intensificar sus esfuerzos para eliminar gradualmente su importante apoyo a proyectos de petróleo y gas en América Latina.
Mapfre ha sido criticada por la organización Insure Our Future (IoF) por seguir apoyando nuevos proyectos de petróleo y gas, lo que socava la lucha contra el cambio climático. Según el ranking de IoF, Mapfre ocupa el decimoquinto puesto mundial en cuanto a sus restricciones en el aseguramiento de combustibles fósiles. Aunque Mapfre ha adoptado algunas restricciones a los combustibles fósiles, especialmente en cuanto al carbón, necesita intensificar sus esfuerzos para eliminar gradualmente su importante apoyo a proyectos de petróleo y gas en América Latina. En términos generales, Mapfre se sitúa por debajo del resto de aseguradoras europeas, salvo Lloyd’s, y ha incumplido su promesa de adoptar objetivos de reducción del 34% de las emisiones absolutas aseguradas de aquí a 2030.
Falta de ambición climática
El aumento de fenómenos meteorológicos extremos como son inundaciones, huracanes, incendios forestales, sequías y otras catástrofes han disparado los pagos hasta una media de 110.000 millones de dólares anuales desde 2017. Más del doble de la media de los cinco años anteriores. Aun así, el informe revela que la mayoría de las aseguradoras siguen apoyando proyectos para aumentar la producción de petróleo y gas.
Las aseguradoras han introducido restricciones sobre el carbón que están teniendo un impacto real. Las nuevas centrales eléctricas de carbón se han vuelto prácticamente ‘inasegurables’. Esto supone que ahora, aunque los avances se han ralentizado, a las empresas del carbón les resulta cada vez más difícil conseguir seguros para nuevos proyectos y para las operaciones existentes y demuestra el poder que tiene el sector asegurador para acelerar la transición hacia el abandono de los combustibles fósiles.
Insuramore calcula que las compañías de seguros con una cuota del 41,2% del mercado comercial de bienes y accidentes y del 62,7% del mercado de reaseguros ya han tomado medidas. Sin embargo, el abandono de los combustibles fósiles no responde a la urgencia de la crisis climática. La mayoría de las aseguradoras siguen suscribiendo la expansión de las infraestructuras de petróleo y gas.
Abandono de los compromisos sobre cambio climático
Las principales aseguradoras también han abandonado los compromisos sobre cambio climático que asumieron como miembros de la Net Zero Insurance Alliance. Se comprometieron a reducir las emisiones de las empresas que aseguran en un 34% entre 2019 y 2030. Y a publicar un plan de transición antes de junio de 2023. Sin embargo, a septiembre de 2023, 20 de los 31 miembros habían abandonado la alianza bajo la amenaza de acciones antimonopolio en Estados Unidos. Los miembros salientes prometieron mantener sus compromisos climáticos, pero no lo han hecho. Ninguna aseguradora ha fijado aún objetivos para reducir sus emisiones absolutas aseguradas en al menos un 34% de aquí a 2030. Sólo unas pocas han publicado planes de transición y objetivos netos cero.
El informe de IoF concluye que si las compañías de seguros se tomaran en serio la ciencia del clima, alinearían plenamente sus estrategias de suscripción e inversión con una senda creíble de 1,5 °C. Pondrían fin a todo apoyo al aumento de la producción de combustibles fósiles. Demandarían a las empresas de combustibles fósiles para hacer pagar a los contaminadores los crecientes costes de las catástrofes climáticas.
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