El sueldo supone una motivación mayor para los trabajadores que las mejoras en conciliación o la promoción profesional
A dos semanas del comienzo de 2019, ya son muchas las personas que se han planteado nuevos retos y han repasado aquellos puntos que desean cambiar en los siguientes meses, ya sean temas personales o laborales. Como ya es tradición, el grupo multinacional de recursos humanos Adecco ha consultado por duodécimo año consecutivo a más de 1.000 trabajadores para conocer sus objetivos y sus deseos laborales de cara a 2019.
A través de esta encuesta, la firma ha podido saber cuáles son las preferencias de los trabajadores españoles con respecto a las condiciones laborales en su empresa. Además, se les ha preguntado por otras cuestiones como el clima laboral, principal vector de fidelización y compromiso; la conciliación personal y profesional, preocupación diaria de todos los trabajadores; y la ética empresarial, factor ejemplarizante y de confianza para los empleados.
Además, los encuestados han descrito sus propósitos para con su empresa de cara a este nuevo año. Toda una declaración de buenas intenciones que va desde la puntualidad hasta el reconocimiento de errores.
Desde que esta encuesta vio la luz en 2007, los trabajadores españoles, año tras año, indican que un aumento de sueldo sería el mejor regalo que podrían tener de cara al nuevo año. Y en esta ocasión no es diferente. Un año más, el 61% afirma que un incremento salarial sería lo mejor que podría traerles el 2019.
Sin embargo, las facilidades para conciliar, tales como el teletrabajo, cada vez alcanzan una mayor relevancia entre los trabajadores. De hecho, en esta última edición, son precisamente las facilidades para conciliar el segundo deseo más señalado por ellos. En tercer y cuarto lugar los profesionales en activo demandan formaciones y un ascenso.
En menor medida, los encuestados apuntan al salario en especie (cheques-comida, guardería, móvil, seguro médico…), seguido de un cambio de funciones en la empresa, tener más vacaciones y, por último, un cambio de jefe.
Por sexos, el ranking no sufre grandes variaciones. Sin embargo, se aprecian algunas desviaciones, como en el caso de un cambio de funciones que es el cuarto deseo más solicitado por ellos (15%), mientras que cae al quinto lugar en el caso de ellas (10%). Las trabajadoras, por su parte, optan en mayor medida por la conciliación de su vida personal y su vida laboral (36% ellas, 30% ellos). Sin embargo, en el caso de los ascensos, son más demandados por los hombres (20%) que por las mujeres (18%).
Por edad, en líneas generales, el ranking se mantiene estable en cada franja, aunque existen algunas diferencias. Los menores de 55 años valoran más la conciliación, mientras que no es así para los mayores de 56 años, donde adquiere mayor relevancia la formación. También cabe destacar que los mayores de 26 y menores de 45 años prefieren la formación al ascenso, mientras que en los menores de 26 años piensan más en subir de categoría profesional, siendo esta la tercera opción preferida con un 26%.
Consultados por el peor regalo que podrían tener este año, los empleados españoles lo tienen claro: una bajada salarial, tal y como ha señalado el 62,8%. En menor medida, los encuestados han indicado la modificación del turno de trabajo (14,1%), un cambio de ubicación o traslado (10,7%), la reducción o eliminación de salarios en especie (7,1%) y un cambio de puesto o de tareas asignadas (5,3%).
El salario es uno de los temas centrales a la hora de hablar de trabajo. Por ello se ha preguntado a los encuestados si creen que su salario se verá incrementado en 2019, a lo que solo el 34,2% ha respondido que sí: un 24,4% afirma que subirá el equivalente al IPC y un 9,8% espera que la subida sea algo mayor. En cambio, el 38,3% opina que no tendrá ninguna subida salarial y el 1,1% va más allá y sospecha que podrían reducírselo a lo largo del año. Destaca que uno de cada cuatro se mueva en la incertidumbre y no tenga aún claro si cree que le van a mejorar su retribución en 2019.
De poder negociar su salario este año, más de la mitad pediría un aumento de sueldo en función de los objetivos de la empresa. El 40,6%, en cambio, solicitaría esa subida, pero sin condiciones. Y el 5% se conformaría con que le mantuvieran el que tiene.
Según los datos obtenidos en esta encuesta, parece que, a mayor edad, menor es el número de personas que demandan una subida salarial sin condiciones. El 57% de los trabajadores de entre 18 y 25 años lo haría, el 44% de los que tienen entre 26 y 35 años, el 38% de los de entre 36 y 45 años y el 33% de los mayores de 46.
Además de preguntarles por las condiciones salariales que desean en este 2019, se les ha consultado acerca de las medidas de coste cero que les gustaría que se aplicaran en su empresa, como la flexibilidad horaria, el teletrabajo o la jornada intensiva. En este sentido, son pocos los trabajadores que apuestan por el teletrabajo (15%). La mayoría de ellos prefiere disponer de cierta libertad de horarios de entrada y salida (41,9%) o tener una jornada intensiva (31,6%).
Por sexo, son las mujeres las que más valoran el teletrabajo. Un 21% de ellas ha elegido esta opción como la medida de coste cero preferida frente al 14% de los hombres encuestados. Sin embargo, es en la franja de entre 26 y 35 años en la que más se solicita el empleo a distancia, con un 23%. De cualquier modo en todos los rangos de edad se ve un ranking unánime: en primer lugar, prefieren flexibilidad horaria, en segundo jornada intensiva y en tercero teletrabajo.
Otra pregunta que se les ha realizado a los más de 1.000 encuestados ha sido acerca de la estrategia que está siguiendo su empresa. El 24% no pide ningún cambio en 2019, ya que considera que la compañía para la que trabaja está siguiendo la senda correcta. Sin embargo, no todos opinan lo mismo. El 12% ve claro que debe haber un cambio de estrategia este año y el 16,9% afirma que el problema está en el comité de dirección, por lo que pide una renovación de este. Además, el 21,2% cree que la solución pasa por un cambio en la distribución de tareas en la compañía. Por último, el 16,3% opina que lo ideal sería que se cambiaran tanto la estrategia como el comité directivo y la distribución de tareas; es decir, abogan por un giro radical en su empresa.
Adecco ha propuesto también una lista de mejoras laborales alternativas para aquellos que no tendrán la posibilidad de negociar su sueldo. En general, se trata de beneficios sociales que recompensan a los trabajadores, aunque no de una manera económica directa. Las mejoras más demandadas dentro de este ámbito son los cursos de formación (67%), un seguro médico privado (64%) y un plan de pensiones (52,5%).
Por debajo de estas mejoras, los encuestados demandan cheques comida (43,5%), coche de empresa (41,5%), ayudas económicas para la educación de los hijos 37%, comedores de empresa (24,8%), y descuentos especiales en ocio, cultura y consumo (21,8%). Con menor importancia, los empleados españoles elegirían beneficios como el móvil de empresa (20,8%), un gimnasio en el lugar de trabajo (18,2%) y una ruta de transporte (16,1%). En menor medida un 15% considera otras opciones como ayudas para la guardería de los niños (cheques-guardería, guardería concertada o en la propia empresa, etc.), internet en casa (13,9%) y disponer de una tarjeta de crédito de la empresa (11,8%).
Con relación al mercado laboral, la mayoría de los trabajadores cree que durante 2019 las empresas se mantendrán estables (41,1%). El 35,6% se muestra positivo y piensa que su empresa aumentará la plantilla, y el 11,1%, más pesimista, se decanta por una reducción de personal.
Por lo general las sensaciones son buenas en cuanto a la evolución del mercado laboral. El 39,4% de los trabajadores españoles sigue pensando que no es un buen momento para cambiar de empleo y el 16,9% se plantea buscar un nuevo trabajo, pero esperará a que la coyuntura económica sea más favorable. Un 39,2% no tiene dudas y cree que 2019 será el año en que cambie de empleo, mientras que el 4,5% se decantará por crear su propia empresa.
Por sexos se aprecian algunas diferencias. El 42% de los trabajadores buscará un nuevo empleo el año que viene, mientras que solo el 36% de ellas lo hará. Las mujeres, por tanto, son más propensas a pensar que no es un buen momento para hacerlo (42% frente al 38% de ellos).
Por edad, son los mayores de 56 años los más lanzados al emprendimiento. El 17% de ellos se plantea crear su propio negocio en 2019. Los profesionales de entre 46 y 55 años, en cambio, se decantan en mayor medida que el resto por un cambio de empleo a lo largo del año (51%).
Preguntados acerca de la movilidad laboral, la gran mayoría (79,5%) no contempla un cambio de residencia en los próximos meses, bien porque quieren permanecer cerca de su familia (51,2%), bien porque se encuentran a gusto con su empleo actual (28,3%). En cambio, el 15,9% no está satisfecho con su situación laboral y el 4,5% cree que en España le será imposible encontrar uno acorde a sus necesidades y sí se plantean trabajar en el extranjero.
Por sexos apenas varían las cifras. Sin embargo, sí lo hacen si desgranamos los datos por franjas de edad. A medida que el rango de edad avanza, el principal motivo por el que no se desplazarían a otro país es el hecho de permanecer junto a su familia. Este factor diferencial se hace más evidente si se comparan a los mayores de 56 (83%) con el de los menores de 25 años, entre los cuales solo un 25% ha señalado este motivo.
El colectivo de 18 a 24 años es el que presenta más particularidades. En su caso, el 39% estaría dispuesto a trabajar en el extranjero, mientras que entre los mayores de 25 años solo lo harían menos del 20%. En esta línea, los benjamines son los que presentan una mayor insatisfacción laboral: el 23% de ellos se mudaría al extranjero porque no está contento con su actual empleo. La cifra en el caso de los profesionales de entre 36 y 45 años, por ejemplo, es del 12%, notablemente inferior.
De igual modo, la proporción de menores de 25 años que consideran trabajar fuera de España porque aquí ven imposible encontrar un empleo adecuado a sus necesidades es mucho mayor. En su caso, es el 16% el que así lo considera, mientras que en el resto de los colectivos no supera el 4%.
La encuesta también tiene por objeto averiguar los aspectos en los que deben mejorar los trabajadores españoles. En este sentido, un año más, los profesionales se muestran críticos y reconocen algunos de sus puntos débiles en el trabajo. Así, la mayoría de ellos (el 70,7%) afirma que fomentar el compañerismo está entre sus compromisos importantes o muy importantes de 2019. El 69% apunta a la planificación como una de sus asignaturas pendientes y lo considera un propósito importante a cumplir.
Los trabajadores también creen que deben involucrarse más en el trabajo (58,8%) y ser menos negativos y proponer más soluciones (57%). Con valores algo inferiores, los encuestados optan por mirar más por la empresa a la hora de reducir costes (56,6%), ser más humildes y reconocer sus errores (50,6%) y ser más puntuales (47,6%).