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La irrupción de las ‘insurtech’, la posibilidad de diseñar productos más completos y personalizados y la transformación de las compañías tradicionales para mejorar la experiencia del cliente son algunas de las tendencias que marcarán la actividad aseguradora en el año que acabamos de estrenar.

Un texto de Virginia M. Zamarreño

Bienvenidos a 2019, el año que Blade Runner retrataba de forma apocalíptica, con androides prácticamente indistinguibles de los seres humanos que deciden rebelarse contra su creador. La película, dirigida por Ridley Scott en 1982, que protagonizan Harrison Ford y Rutger Hauer describe las peores consecuencias de un uso inadecuado de la tecnología y que en nada se parece a las oportunidades que ofrecen las innovaciones tecnológicas que el sector asegurador se ha propuesto utilizar para mejorar de forma exponencial su relación con el cliente.

De acuerdo con las predicciones avanzadas por Mapfre a finales del pasado ejercicio, los próximos 12 meses estarán marcados por la colaboración entre el seguro tradicional y la tecnología. Esta simbiosis se plasma en el sector de las insurtech. Estas empresas no son una novedad, acompañan a las llamadas aseguradoras tradicionales desde hace algunos años, pero la industria aseguradora es cada vez más consciente de las bondades de trabajar de forma conjunta con ellas.

En España, más de 150 empresas insurtech colaboran de alguna manera con el sector asegurador, ya sea agilizando procesos internos de las compañías o ayudándolas a obtener rendimiento de la ingente cantidad de datos que tienen de sus clientes, a los que en 2019 podrán ofrecer pólizas cada vez más completas y personalizadas.

Ahí tienen la primera tendencia. El Observatorio Insurtech de Sngular y Cálculo, presentado recientemente, ahonda en esta tendencia al afirmar que la colaboración con startups de innovación abierta ayuda al seguro a ofrecer nuevos productos y servicios Entre estas novedades estarán los microseguros sencillos y personalizables, seguros de pago por uso, nuevos productos para la jubilación, ciberseguros y pólizas para las necesidades de la economía colaborativa.

La segunda tendencia va ligada a la transformación del sector asegurador hacia modelos más ágiles y accesibles. Puede considerarse una tendencia transversal, pues de alguna forma va ligada a todas las novedades que los expertos prevén para el ejercicio que acabamos de estrenar. El objetivo de este nuevo ecosistema es lograr de una vez por todas la tan ansiada omnicanalidad, que no es otra cosa que ofrecer al cliente la posibilidad de comunicarse con la compañía y hacer transacciones completas desde cualquier canal de contacto, ya sea un agente o corredor de seguros, la web, el correo electrónico y, por qué no, aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp o Telegram. Los chatbots y asistentes virtuales jugarán un papel determinante en este campo.

De los ‘GAFA’ a los ‘FAANG’

La competencia de los gigantes tecnológicos y otros nuevos competidores parece menos amenazante cuando las aseguradoras se rodean de insurtech. Así lo considera el primer informe mundial sobre insurtech (World Insurtech Report), elaborado por Capgemini y Efma. A Google, Amazon, Facebook y Apple se unen las plataformas de vídeo como Netflix. Todas ellas tienen en común el uso del big data para conocer los deseos de sus clientes antes de que ellos mismos los sepan.

El seguro no descarta que en un futuro no muy lejano se comercialicen pólizas a través de ellos. “La nueva competencia va a obligar a las aseguradoras tradicionales a ser ágiles e innovadoras. La colaboración con la insurtech que mejor se adapte a sus características facilitará el trayecto hasta la mejor posición posible en medio del estado disruptivo del sector”, señala…

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