La inteligencia artificial no es exclusiva de empresas de alta tecnología. Es una realidad accesible capaz de transformar a las organizaciones gracias a las nuevas tecnologías que permiten realizar funciones cada vez más sofisticadas.
En este contexto, los sectores asegurador y bancario se perfilan como los más afectos a implantar y explotar las aplicaciones tecnológicas debido a los cambios que se están produciendo en sus canales tradicionales en cuanto a la captación y fidelización de clientes.
Asimismo, hay que destacar la importancia de la inteligencia artificial en todos los departamentos de las empresas, pues no sólo facilita y simplifica muchas de las tareas actuales, sino que supondría un incremento de la eficiencia en el área de RR.HH, mejorando la predicción sobre el comportamiento y efectividad de un nuevo empleado. O en la red comercial ofreciendo la posibilidad de detectar clientes potenciales, cambios repentinos en ciclos de compra o actuaciones de la competencia.
“En este sentido, Neovantas ha desarrollado la aplicación JOY, un aglutinador de información desestructurada, oral, escrita y de los datos del CRM para elaborar de forma automática índices de interés para la dirección de las empresas gracias a sus motores de inteligencia artificial. Ha empezado con un índice de satisfacción del cliente, sin preguntarle, que permite a las entidades entenderle en cada momento y dibujar acciones concretas cuya puesta en marcha ayuda a mejorar la satisfacción del cliente con celeridad”, indica José Luis Cortina, presidente de Neovantas.
Por ello, las aseguradoras deberían invertir en inteligencia artificial con el fin de extraer diferentes con respecto a la extensa información con la que cuentan, aportando así nuevos elementos útiles a los departamentos de marketing, atención al cliente, comercial y servicios postventa. De esta forma se podría conocer con exactitud el grado de satisfacción del cliente, actuando en consecuencia de la manera más acertada.