Las ciberamenazas financieras son cada vez más peligrosas, ya que afectan al bienestar económico de las víctimas, ya sean individuos u organizaciones. Los cambios drásticos ocurridos en 2020 han afectado de forma inevitable al modus operandi de los ciberdelincuentes financieros. Aunque no todas las tácticas, técnicas y procedimientos se han visto influenciadas por el cambio en nuestros hábitos de vida y trabajo actuales, no podemos subestimar su impacto. Sigue leyendo