Durante los últimos años hemos visto como nuestras casas se volvían más y más inteligentes gracias a los dispositivos conocidos como IoT (Internet de las cosas). Estos objetos, como los robots de limpieza, que son capaces de aprender la forma de tu casa; o los asistentes virtuales, que son capaces de reconocer tu voz y realizar acciones, nos permiten realizar tareas de forma sencilla, automática. Y, en muchos casos, conectándose a Internet. Sigue leyendo