El importe de las tasas académicas y las restricciones en la concesión de becas obligan a muchos universitarios a plantearse tener que abandonar sus estudios. Además, el fallecimiento, invalidez o situación de desempleo de los familiares que soportan el coste de su formación son otros problemas con los que se pueden enfrentar. Esta realidad les lleva a no poder pagar los costes de la matrícula y a abandonar los estudios. Sigue leyendo