En los últimos años, las tarjetas revolving han estado en el punto de mira de los usuarios y, también, de los despachos de abogados y plataformas especializadas en este tipo de reclamaciones. Una sentencia del 4 de marzo de 2020 por el Tribunal Supremo en la que se declaraba usurario el tipo de interés del 26,82% de una de estas tarjetas, ponía en el ojo del huracán este producto. La decisión del Alto Tribunal sentó jurisprudencia para instancias inferiores y abrió la puerta a las reclamaciones de clientes de forma masiva. Sigue leyendo