Descubre este y otros contenidos interesantes en el número de febrero de Seguros elEconomista
En la vida en ocasiones no se nos mide por lo que valemos, sino por lo bien que nos vendemos. Esa máxima referida a las personas puede aplicarse perfectamente al mundo del turismo. Hay territorios, lugares y ciudades increíbles que bien por pertenecer a un país o región con menos nombre o fama, a causa de una deficiente campaña publicitaria o lastrados por un prejuicio o leyenda urbana se mantienen indiferentes al interés del viajero habitual. Sigue leyendo